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El efectivo tiene dos resoluciones de baja en la Dirección de Justicia Policial, cuyo titular actualmente es el Crio. Gral. Miguel Leguizamón. Ambos fallos tienen que ver con la denuncia pública que hizo Paredes a través de la prensa y de su cuenta de Facebook contra su entonces jefe directo, el Crio. Princ. Inocencio Portelli, así como contra los jefes policiales del departamento de Canindeyú y toda la cúpula encabezada por el propio Sotelo.
El efectivo policial denunció en julio del año pasado que sus superiores le otorgaron sugestivos privilegios a Diego Candia. Este último es cuñado de “Neneco” Acosta, exintendente de Ypejhú y autor intelectual del asesinato del periodista Pablo Medina.
Dijo que Portelli y los otros agentes hicieron dormir a Candia en una cómoda habitación, en lugar de encerrarlo en el calabozo. Como estaba de guardia y temía que escapara quiso devolverlo a la celda, pero fue reprendido por sus superiores. A partir de entonces, manifestó públicamente su descontento, motivo por el cual fue trasladado de Curuguaty y sumariado.
Leguizamón indicó ayer que el suboficial cometió faltas contra la Policía y detalló que están tipificadas en el artículo 42°, numeral 4 del Reglamento Disciplinario, que dice: “El que comete actos o participa en hechos que quebranten el funcionamiento normal o el prestigio institucional, al realizar conductas prohibidas por la ley, que afecten gravemente la imagen institucional”.