Cargando...
SAN JUAN NEPOMUCENO (Antonio Caballero, corresponsal). La víctima fatal fue Galo Ramón Cardozo (52), comerciante, quien acusó un tiro en la cabeza producto de un disparo con una pistola 9 mm durante una emboscada ejecutada por cinco hombres que se movilizaban en un automóvil Nissan Sunny, plateado, con placa BED 425, propiedad de Florentino Duarte Rodas.
Este vehículo fue robado el 14 de octubre pasado, en la ciudad de San Lorenzo.
El atentado ocurrió sobre la ruta que une esta ciudad con Tava’i, a la altura de la compañía Yvyatî. El vehículo utilizado en el ataque fue quemado a unos 30 kilómetros del lugar del hecho, en la compañía Ñu Cañy.
Según la información suministrada por los investigadores, Galo Cardozo se desplazaba solo en su camioneta Nissan Patrol, hacia la ciudad de Caazapá, donde trabaja con sus hermanos en una distribuidora de bebidas y otros productos. El comerciante venía de la ciudad de María Auxiliadora, departamento de Itapúa, donde vive con su familia, y fue emboscado en un sitio donde se encuentra un precario puente de madera.
Según los datos policiales, el comerciante primero resultó herido por disparos de una escopeta calibre 12 y posteriormente recibió el tiro en la cabeza, con el arma 9 mm., y que fue lo que le produjo la muerte.
La policía y funcionarios del Ministerio Público mantienen como primera presunción que el objetivo de los maleantes fue el asalto, pero esa teoría podría no ser muy creíble, pues otras versiones indican que Cardozo nunca transportaba dinero en grandes cantidades.
Néstor Cardozo, hermano del asesinado comerciante, comentó que solamente la billetera de Galo faltaba y que todos los demás objetos que tenía dentro del vehículo, como una escopeta calibre 12, quedaron en el rodado. Añadió que cada 15 o 22 días el comerciante visita a su familia, sale viernes y vuelve lunes a la mañana a Caazapá, donde trabaja en el negocio con sus hermanos.
El asistente fiscal de esta localidad, Carlos Ramírez, dijo que la primera presunción apunta al asalto, pero sin descartar que pueda haber otros motivos del asesinato de Cardozo.
Efectivos policiales de la división de Investigación del departamento de Caazapá levantaron las evidencias del lugar donde se produjo el mortal ataque.
Otros datos recabados indican que Galo Ramón Cardozo solamente trabaja con sus hermanos, quienes son los dueños de la distribuidora de bebidas.
Es una persona que no es acaudalada, y se moviliza en un vehículo que ya tiene sus años, por lo que la teoría del asalto no tiene sustento. Por eso es que también surge la posibilidad que se haya tratado de un ajuste de cuentas. Ahora se investigará si Galo Cardozo ha recibido amenazas en las últimas semanas o si tenía algún enemigo.