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Una investigación iniciada por el Ministerio Público Estatal del estado de San Pablo en 2010, que duró 3 años y 6 meses, reveló el mayor mapeo de la historia del crimen organizado en Brasil, con una radiografía inédita del funcionamiento del Primer Comando Capital (PCC), publica el periódico brasileño “O Estadão”, que accedió a los documentos.
De acuerdo a los datos, “Capilo” figura entre los principales surtidores de la droga del grupo criminal brasileño, junto con los brasileños Claudio Marcos Almeida, alias “Django”; Rodrigo Felício, alias “Tiquinho”; y Wilson Roberto Cuba, alias “Rabugento”.
Los investigadores reunieron cientos de elementos, como audios, documentos, declaraciones de testigos, informaciones que encontraban en las incautaciones de cientos de kilos de drogas, y con ello, develaron los orígenes, el organigrama delictivo y también los proveedores.
Charla de negocios
El diario “O Estadão” menciona que los investigadores lograron grabar una conversación entre “Capilo” y Marco Willians Herbas Camacho, alias “Marcola”, el 14 de mayo de 2010. Durante la charla quedó comprobado el envío de drogas desde Paraguay a Brasil y la intención de expandir los negocios del narcotráfico.
Según la nota, “Capilo” llamó desesperado a “Marcola” para pedirle 350.000 dólares para pagarle a una persona con la que “no quería fallar” y debía entregarle esa suma para el 18 de mayo.
“Marcola” le aseguró que en ese mismo momento se pondría en campaña para juntar el dinero y enviárselo, a fin de que “Capilo” pueda mandar una carga de 200 kilos de cocaína de alta pureza.
“Como este material nunca vi”, dijo “Capilo”, en referencia a la mercancía que le enviaría a “Marcola”.
“Capilo” le insistió que consiga el dinero; hablaron de una tercera persona a la que “Marcola” le pediría un monto. Finalmente, le indicó a su interlocutor que contactara con un narco que responde al seudónimo de “Bile”, que comanda el negocio en el estado brasileño de Bahía, para comentarle “la idea” y así comenzar el envío de la droga.