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Los detenidos fueron identificados como Ulises Peñaloza Llinas (57), de nacionalidad colombiana, y Fernando Stimac Jaen (43), venezolano nacionalizado español.
El operativo a cargo de los agentes de la Unidad de Inteligencia Sensible de la Policía Nacional (SIU, por sus siglas en inglés), y en coordinación con sus pares de Antinarcóticos y el fiscal Javier Ibarra, comenzó a las 16:00, con la captura del primero de los citados.
Peñaloza Llinas cayó en la intersección de las calles Malutín y Del Maestro, en el barrio Villa Morra, cuando se encontraba al mando de una camioneta Toyota Runner blanca cuatro puertas con matrícula BEL 434. Los agentes hallaron sobre el asiento trasero del rodado un bolso que contenía 16 panes de la droga.
“Nosotros ya teníamos la orden de allanamiento, pero a los efectos de juntar más elementos detuvimos primero a uno de los extranjeros en Villa Morra. Cuando encontraron los paquetes cargados con cocaína dentro de su camioneta se confirmaron nuestras sospechas”, explicó el fiscal Ibarra.
Los intervinientes fueron después hasta la residencia que el extranjero alquilaba, ubicada sobre la calle Padre José González N° 1933 casi Genaro Romero. Allí detuvieron a Stimac Jaen y procedieron a catear la casa hasta que encontraron 260 “panes” ocultos entre un doble fondo que estaba entre el cielorraso y el placar de una de las habitaciones.
“También encontramos moldes, prensa y otros elementos que son típicos de la actividad del narcotráfico, como piñatas”, afirmó el representante del Ministerio Público.
Empresas de “fachada”
El fiscal Javier Ibarra, de la Unidad Antidrogas, explicó que los dos extranjeros detenidos ayer residían en el país hace más de dos años y se hacían pasar por administradores de empresas como fachada para disfrazar su actividad ilícita.
Conforme a los datos manejados por los investigadores, ambos administran varios negocios, además de ser los representantes en el país de “Conagra Meat & Poultry”, una empresa internacional dedicada a la producción, distribución y exportación de productos alimenticios de todo tipo.
“Estas personas figuran como exportadores. A través de la Aduana descubrimos que tenían negocios lícitos que operaban como fachada”, explicó Ibarra.
“Exportaban productos de todo tipo. Por lo que pudimos encontrar la documentación, tenían una empresa exportadora de carne, y a través de la aduana importaban vehículos, maquinaria, alimentos y otros tipos de mercaderías”, refirió el agente de la Fiscalía.
Los detenidos y la cocaína se encuentran a disposición del Ministerio Público.
Rastrean a más implicados
El fiscal Javier Ibarra explicó, entre otras cosas, que los investigadores rastrean a otros dos narcotraficantes vinculados a los detenidos y que también se investiga la conexión paraguaya de la red desbaratada ayer. Uno de los buscados sería de origen árabe. Ibarra también refirió que el posible destino final de la cocaína confiscada ayer era Europa, debido a que el mercado paraguayo es considerado “chico” para esa cantidad.