Cargando...
BRASILIA y RÍO DE JANEIRO (EFE, AFP). “Vamos juntos a cambiar el destino de Brasil, sabíamos para donde estábamos yendo, ahora sabemos para dónde queremos ir, mi querido pueblo brasileño, muchas gracias por la confianza”, dijo Bolsonaro en su primera manifestación pública como mandatario electo.
Bolsonaro capitalizó la decepción y la rabia de una población hastiada de los escándalos de corrupción.
En la primera vuelta, celebrada el pasado día 7, Bolsonaro ganó con un 46% de los votos y Haddad quedó en el segundo lugar, con un 29%, entre un total de trece candidatos.
El excapitán del Ejército obtuvo 57,7 millones de votos, contra 46,8 millones para Haddad.
El pasado 6 de septiembre, en medio de la campaña para la primera vuelta, Bolsonaro fue apuñalado en medio de un mitin y permaneció hospitalizado durante 23 días.
Las heridas obligaron a los médicos a someterle a dos operaciones y lo mantuvieron hospitalizado durante 23 días, lo que interrumpió su campaña en las calles, que desde entonces se limitó a las redes sociales.
Bolsonaro, de 63 años, es diputado desde hace casi tres décadas y ha sido elegido presidente en representación del Partido Social Liberal (PSL), una formación minúscula hasta ahora pero que en las legislativas del pasado 7 de octubre consiguió 52 de los 513 escaños en la Cámara de Diputados.
El grupo del PSL solo será superado en la próxima legislatura por el del Partido de los Trabajadores (PT, de Lula da Silva), que tendrá 56 diputados, en una cámara totalmente fragmentada y en la que estarán representados 30 partidos.
El capitán se ha presentado a las elecciones con una fórmula completada por el general de la reserva Hamilton Mourao, de origen mestizo indígena.
El presidente electo de Brasil ha prometido mano dura contra la delincuencia, así como ha anunciado una línea liberal en la economía, con una fuerte disminución del aparato gubernamental.
“Pueblo indignado”
Cientos de miles de personas estallaron de júbilo en las calles de Brasil con la victoria de Bolsonaro.
“No tengo nada que temer en un gobierno de un exmilitar. Este país necesita orden, y peor nunca podrá estar, con tanta corrupción e inseguridad”, exclamó Jaz Lima, profesora jubilada de 60 años.
Los gritos de triunfo se entremezclaban con abucheos contra el encarcelado por corrupción expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien había nombrado a Haddad como candidato de su formación política.
Un muñeco inflable con la imagen de Lula en vestido de presidiario fue levantado sobre la calle.
“Aquí está este pueblo indignado, disconforme con la corrupción y la inseguridad, acompañando a Bolsonaro. Este pueblo habló. Es la primera vez que me siento representado”, dijo André Luiz Lobo, de 38 años.
El presidente del Paraguay, Mario Abdo Benítez, envió sus felicitaciones al mandatario electo de Brasil.