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TTE. SÁNCHEZ, distrito de Villalbín Ñeembucú (Clide Martínez, corresponsal). La docente de la escuela Básica Virgen del Perpetuo Socorro, Florencia del Puerto, expresó su inquietud respecto al estado del edificio, particularmente del techo que ya no protege en los días de lluvias, la falta de materiales didácticos y el rudimentario pizarrón.
Ramona Saucedo, docente con antigüedad de 22 años, quien enseña en dos grados y lo hace en carácter ad honórem –en uno de ellos desde hace más de dos décadas–, lamentó que deba enseñar en plurigrado, dividiendo la pizarra en dos, tornándose imposible el desarrollo del programa de estudios.
Para Ramón Sánchez, exdirector de la institución, es imposible una educación de calidad enseñando dos grados en un aula de cuatro metros cuadrados.
Peter Tasen, padre de familia, afirmó que es inaceptable que en 2015 se enseñe dos grados en una misma aula. “Ni en la época de Carlos Antonio López existía el plurigrado”.
Señaló que el mayor problema es la gran barrera que existe entre las autoridades y los profesores. “Las autoridades políticas y educacionales se creen dioses, ni siquiera se dignan en participar de una reunión convocada por los padres de familia y profesores para dialogar y ver posibles soluciones a los problemas”.
Tasen, ciudadano estadounidense que reside en el lugar, dijo que es incoherente que se prive de un rubro de maestra a una escuela, mientras los funcionarios de Itaipú y Yacyretá cobran millonarios salarios.
“La educación es fundamental para un país que quiere desarrollarse. ¿Por qué progresan Corea del Sur, Singapur y Finlandia?, porque ponen en primer lugar a la educación e invierten en conocimientos”, refirió.
El profesor Antonio Sánchez, director del colegio de la zona y padre de familia, afirmó que se debe consolidar la escuela para evitar la migración de los niños y terminar con el plurigrado para mejorar el nivel de los estudiantes.