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CIUDAD DEL ESTE (Mariana Ladaga, de nuestra redacción regional). La audiencia de conciliación se realizó en el marco de una denuncia por difamación, calumnia e injuria tras una demanda presentada por la intendenta Sandra McLeod de Zacarías (ANR) contra el concejal Celso “Kelembu” Miranda.
La medida de la jefe comunal se basa en declaraciones periodísticas en las que el edil la calificó de “ladrona” y “sinvergüenza” por presuntas irregularidades en la compra del almuerzo escolar. Además la tildó de “asesina” por el caso de la niña Sarita Insfrán, de dos años de edad, quien murió a consecuencia de una electrocución al pisar un cable pelado en la plaza Agustín Van Aaken.
La audiencia de conciliación se llevó a cabo ante la jueza Carmen Teresa Barrios. La intendenta Sandra McLeod de Zacarías (ANR) estuvo acompañada de su abogado defensor Derlys Martínez.
El concejal Celso “Kelembu” Miranda estuvo representado por los abogados Paraguayo Cubas, Ulises Quintana y otros, a los que después se sumó Mauro Barreto, con quien la magistrada tiene causal de inhibición.
El abogado Martínez afirmó que la audiencia era de mero trámite, ya que la querella tenía la posición firme de no conciliar. Pese a ello, durante la diligencia el concejal Miranda se ratificó en las acusaciones que llevaron a la denuncia por difamación, calumnia e injuria.
“Yo voy a la cárcel y usted también se va a la cárcel con los documentos que yo tengo. Es una ladrona, sinvergüenza”, le dijo el edil durante la audiencia.
Al término de la diligencia y cuando Sandra McLeod de Zacarías se retiraba de la sede del Tribunal Penal, siguió: “bandida”, “sinvergüenza”, “saqueadora de la ciudad”.
Atendiendo a que los funcionarios municipales no permitían la salida de “Kelembu” del Tribunal Penal, debieron intervenir antimotines de la Policía Nacional, que formaron un cordón y el edil pudo retirarse a bordo de una patrullera.
Se inhibirá
Casi al final de la audiencia el concejal Miranda expuso que uno de sus abogados defensores es Mauro Barreto. Ante el anuncio la jueza Carmen Barrios adelantó que se inhibirá.
El abogado Derlys Martínez explicó que ahora el expediente deberá pasar al magistrado suplente, que tendrá a su cargo disponer la elevación del caso a juicio oral y público.
¿Turba de arreados?
Una turba de aproximadamente 150 funcionarios municipales, en pleno horario laboral, esperaba al concejal Celso Miranda, a quien le gritaron y le impidieron que se retirara del Tribunal Penal. El grupo estaba encabezado por el jefe de Fiscalización, Ireneo Franco; la administradora del mercado de abasto municipal, Alicia Benítez; la exconcejala Aida Molinas y el director de Seguridad y Tránsito, Carlos Florenciáñez. Fuentes que pidieron no ser identificadas por temor a represalias dijeron que los funcionarios municipales fueron obligados a presentarse ayer, a las 7:00, frente al Tribunal Penal, donde debían justificar presencia, so pena de perder sus puestos si no lo hacían.