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CRUCE SANTA CLARA, distrito de Pirapó, Itapúa (Juan Augusto Roa). Ayer bloquearon cerca de seis horas la Ruta 6, en este sitio, y hoy continuarán con la medida de fuerza. “No quisimos llegar a esta instancia. Agotamos todos los medios posibles para lograr un acuerdo con los representantes del Gobierno y los industriales, pero sencillamente nopenái orerehe (nos ignoraron)”, señaló Francisco López, de la coordinadora de productores de hoja de yerba de Mayor Otaño.
El dirigente señaló que existe un acuerdo vigente, del año 2016, entre gobierno e industriales, por el cual se estableció precio mínimo de G. 1.800 el kilo de la hoja verde, puesta en secadero, pero ese acuerdo, válido y vigente no fue respetado sino por dos o tres empresas, entre ellas, la cooperativa Colonias Unidas y la yerbatera Selecta, pero el resto apenas pagó entre G. 1.000 y G. 1.200 el kilo.
“Aquí tenemos un problema grave, y es que los técnicos que hablan de condiciones para fijar el precio del producto mienten, y posiblemente el ministro (del MAG, Denis Lichi) no entienda el tema, por eso hace tiempo venimos reclamando por una técnica que es de nuestra confianza y conoce el tema, la ingeniera Zunilda Funes, para que se la integre al equipo de trabajo en la fijación de precios”, señaló.
López sostuvo que la producción de hoja de yerba es uno de los últimos rubros de renta que le quedan al pequeño productor agrícola, porque otros que anteriormente le daban vida, como el tung y el algodón, ya no existen, y el cítrico no les resulta rentable.
“El Gobierno tiene la obligación de mediar, de cuidar que el sector campesino no pase hambre y sea explotado por un sector voraz e inhumano (el sector industrial). Pareciera que existe una política para exterminar al pequeño productor”, dijo.
Según estimaciones, el precio que se paga actualmente no permite sobrevivir, y si la gente cosecha y entrega su producto, es porque no tiene otra opción.
De acuerdo con cálculos promedio de un referente, si el precio de la hoja sube a G. 2.200, la yerba chanchada subiría a unos G. 6.400 el kilo, y el precio de la yerba mate a granel, que es muy relativo y variable, sería unos G. 18.000 el kg.