Suman evidencias de que acceso no tiene razón de ser

Por Artigas, desde Lombardo hasta San Estanislao –accesos que figuran en el proyecto de Costanera II–, hay exactamente 1.300 metros. Mientras que hoy, siguiendo por Lombardo en línea recta hasta el río, hay exactamente 1.800 metros. Si los técnicos del MOPC se tomaran el trabajo de hacer esta medición, sabrían que no tiene sentido construir una entrada que solo aumentará la distancia que debe recorrer el conductor para llegar a la Costanera.

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Durante un recorrido por la zona en que se proyecta construir el acceso a la Costanera II por la calle Lombardo, utilizando un GPS, ABC pudo constatar que desde Artigas y Lombardo, siguiendo en línea recta esta última calle hasta el río, hay exactamente 1.800 metros. Mientras que por Artigas, hasta el siguiente acceso proyectado, la calle San Estanislao, hay solamente 1.300 metros.

Es decir, el tan mentado acceso por la calle Lombardo, que será el más largo que se construirá, carece de utilidad práctica alguna. A cualquier conductor que circule por Artigas y desee llegar a la Costanera le será más corto el trayecto continuando por Artigas, hasta San Estanislao, que meterse en el acceso de Lombardo

Como si esto fuera poco, el acceso por Lombardo como está proyectado ni siquiera será en línea recta, sino que tendrá 2.080 metros (más de dos kilómetros) según los cálculos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), como aparece en la infografía que acompaña esta nota, lo que significa que la distancia para llegar a la Costanera por Lombardo será aún más larga, una vez que esté concluida la obra.

En la circunferencia que se observa en la infografía, también puede notarse que si el radio es la longitud existente entre la intersección de Artigas y Lombardo y de esta última con la Costanera, el acceso por San Estanislao está mucho más cerca que la salida a la Costanera por Lombardo.

Lo mismo ocurrirá para quienes viniendo por Lombardo desde Sacramento quieran incorporarse a la Costanera. A ellos les convendría igualmente continuar por Artigas hasta llegar a San Estanislao.

No se debe dejar de considerar que la avenida Costanera será una autopista de rápida circulación, y entre más accesos y por ende semáforos se le incorporen, más lejos estará de este propósito.

Otro punto no menos importante es el hecho de que una vez que está concluida la obra, la circulación por Artigas ya no estará colapsada como lo está el día de hoy, por lo que el tiempo de desplazamiento será mucho menor. Por tanto, es totalmente ilógico llenarla de accesos a la Costanera.

El capricho del MOPC será muy costoso

El absurdo de convertir a Lombardo en una entrada a la avenida Costanera, desde ningún punto de vista útil para la ciudadanía, costará aproximadamente US$ 5 millones de dólares, según las estimaciones del propio Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.

En este monto no se incluyen las indemnizaciones que habrán de pagarse, tomando en cuenta que hoy la calle Lombardo es un estrecho camino de tierra totalmente ocupado por centenares de pobladores que ya anunciaron que no se irán sin una compensación que consideren justa.

MOPC revisará todo el proyecto

El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) anunció la semana pasada que revisará todo el proyecto de construcción de la avenida Costanera II, antes de remitirlo al Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (Focem) para su estudio. El Gobierno pretende que dicho organismo del bloque sea el que financie la construcción de tan importante obra vial.

En ese marco, la semana pasada anunció también el inicio del proceso de cancelación de la licitación en la que ya habían sido adjudicadas las empresas constructoras T y C -de Francisco Griñó- y CDD de César Daniel Delgado y la realización de un nuevo llamado en el primer trimestre de este año.

Por exigencia del Focem, el nuevo llamado deberá hacerse con carácter internacional.

Se conectará con la avenida Ñu Guasu

La diferencia sustancial entre el nuevo proyecto y el que se adjudicó en noviembre del año pasado es que el renovado incluye la extensión de la avenida Costanera hasta conectarla con Ñu Guasu -actualmente en construcción- y no solamente hasta Primer Presidente, como se prevía en el proyecto original.

Se estima que la Costanera II junto con sus accesos tendrá una extensión de 13 kilómetros aproximadamente.

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