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El miércoles 30 de enero pasado, en su sede de Buenos Aires, la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) abrió los sobres de ofertas de la licitación N° 669, para el equipamiento electromecánico de la nueva central hidroeléctrica a ser construida sobre el brazo Aña Cua, del río Paraná, ubicada enteramente en territorio paraguayo.
Los consorcios que resultaron precalificados en la etapa técnica fueron IMPSA-CIE-Power China, que ofertó US$ 116.379.881, y la alemana Voith Hydro, cuya oferta fue de US$ 99.689.577,84. No obstante, de acuerdo a los datos de la binacional, el “contenido local” será tenido en cuenta a la hora de elegir la propuesta.
Según las estimaciones de la entidad paraguayo-argentina se esperaba que la oferta orillara los US$ 170 millones. Sin embargo, la compañía alemana Voith Hydro, para sorpresa de los directivos del citado consorcio (que se creían ganadores “de facto”) y de la prensa argentina, presentó una propuesta 41% menor a la prevista.
Sin embargo, el consorcio que prácticamente queda fuera en esta puja, y de una manera llamativa, presentó a la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) un pedido, que fue calificado como “inusual” y “contrario a las normativas vigentes”, por funcionarios paraguayos.
Araverá pidió a la EBY en Buenos Aires que le remitan, por el término de cinco días, la planilla de precios de su competidora, la Voith Hydro, que presentó la menor cotización, “para comparar lista de precios”.
De acuerdo a fuentes consultadas, ante este pedido el director paraguayo, Nicanor Duarte Frutos, opinó “no debe darse lugar” a la solicitud en cuestión por dos razones: 1. El pliego de bases de la licitación no admite la posibilidad de solicitar la planilla de precios del competidor. 2. El pliego prohíbe que haya comunicación de cualquier naturaleza entre los oferentes y la convocante antes de la adjudicación.
Consultado en la víspera sobre el particular, el jefe financiero de la margen paraguaya, Luis Fretes Escario, quien participó del acto de apertura de las ofertas, coincidió con Duarte Frutos afirmando, en forma escueta pero enfática: “Vamos a ajustarnos a lo establecido en el Pliego de Bases y Condiciones. Este tipo de licitaciones tiene sus complejidades por el interés económico”.
Tres turbinas
Según datos de la EBY, con este proyecto serán incorporadas tres turbinas “Kaplan”, del tipo “sincrónicos trifásicos”, accionadas por las turbinas hidráulicas, con eje vertical totalmente cerradas y refrigeradas, con intercambiadores de calor aire/agua alrededor del estator y tendrán una capacidad de 100 MVA cada una.
En cuanto al costo total de la central, Nicanor Duarte Frutos no se aventuró a dar una cifra definitiva, aunque según los números actualizados al año 2017 (gobierno de Horacio Cartes) ascendía a US$ 575 millones.
Dudas sobre los empleos
La construcción de la nueva central de Aña Cua implicará “la generación de empleo directo para unas 3.000 personas”, según el director paraguayo Duarte Frutos. Sin embargo nadie se percata de que la obra es binacional, razón por la cual, de esos 3.000 puestos de trabajo Argentina exigirá el 50%, si tenemos suerte. Además, las contratistas extranjeras traen su propio plantel de técnicos y personal, luego, una vez más, que lo general no esconda lo particular.