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A su criterio la medición que realiza la banca matriz no es creíble porque a la hora de publicar los números son maquillados y desvirtúan la realidad. “No creemos que la inflación sea solo 4,5%, de ninguna manera”, insistió en forma categórica.
Rojas dijo que el salario de los trabajadores tiene una pérdida en su valor del 30,7%, por lo que considera imprescindible crear un instituto de estudio permanente de salario y costo de vida para determinar la inflación real, que tenga credibilidad, seriedad y responsabilidad.
“El BCP tiene la desfachatez de decir que hubo deflación en algunos meses, lo que no condice con la realidad que se siente en la calle, en el campo, en las ciudades”, indicó. En ese contexto, reforzó señalando que cuando uno va de compras la realidad de los precios es otra al que describe la institución estatal.
Rojas se refirió de esta manera al último informe de cierre del año que dio a conocer el pasado jueves el BCP y que sitúa la inflación en 4,5%, como consecuencia del aumento en los precios de los productos frutihortícolas y de la carne.
La banca matriz había previsto, en principio, cerrar el año con una inflación de 3,5%, luego lo elevó a 3,8% por la suba de los productos frutihortícolas y en el informe que dio su titular este mes, Carlos Fernández Valdovinos, lo ajustó a 4,2%, pero finalmente terminó en 4,5%.
Es la primera vez que la inflación sobrepasa la meta del 4% establecida por el BCP desde que se implementó este esquema en el año 2011.