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El ente agrario promueve desde el año pasado este proyecto de ley especial para regularizar la situación de los ocupantes ilegales del inmueble conocido como Antebi Cue (extierras de Cipasa); el cual había sido aprobado en Diputados en noviembre de 2014, pero fue rechazado posteriormente en el Senado, en abril de 2015, conforme a lo informado por Carlos Soler, gerente de Créditos de la institución.
La propuesta legislativa volvió a la cámara baja hace tres meses y hasta la fecha no tuvo tratamiento. “Si los diputados no tratan, el rechazo de los senadores tendrá sanción ficta. La fecha límite es la próxima sesión del miércoles”, advirtió.
Argumento del Indert
Para promover el proyecto de ley especial, el instituto agrario argumenta que de la expropiación total de Antebi Cue solo 41.000 Ha. pudo destinar a colonias campesinas; 103.000 Ha. fueron declaradas reserva natural; mientras que 80.000 Ha. son explotadas por no más de 20 ganaderos.
El ente argumenta que un juicio de desalojo de todos los estancieros y ocupantes ilegales podría durar décadas, razón por la cual propone sancionar y promulgar la ley especial.
La idea es que toda persona no sujeta de la reforma agraria que ocupe irregularmente las tierras sin ser dueña legítima pague el precio de mercado por ellas, es decir, al menos US$ 1.000/Ha.
“El Indert va a recuperar el dinero invertido y, además, tendrá ganancias”, según lo indicado por Soler.
En tal sentido, añadió que el Indert podría recibir al menos US$ 80 millones por las tierras que costaron al Estado G. 21.500 millones (unos US$ 42 millones al cambio actual).
El pago por la expropiación, que data de 1995, se estableció en 10 cuotas, pero recién terminaron de pagar hace dos meses. El Estado aún debe abonar unos US$ 5 millones de intereses por mora, según se informó.
La propiedad, de 224.000 hectáreas, ubicada en los departamentos de Concepción y Amambay, había sido expropiada por Ley 517 de 1995 a los fines de la reforma agraria, pero nunca se hizo una utilización adecuada de dicha propiedad, no hubo proyectos ni atención del Estado. De hecho se sabía que en general no eran tierras aptas para agricultura.
Histórica expropiación
La expropiación de Antebi Cue es la mayor que se realizó en toda la historia de nuestro país, pero que terminó convirtiéndose en un “elefante blanco”, pues solo la fracción minoritaria fue usada para colonias campesinas. La propiedad era de la familia Antebi.
Uno de los personajes públicos que estuvieron envueltos en la compra de derecheras de Antebi Cue fue el difunto Magdaleno Silva, quien se había autoadjudicado unas 1.600 Ha. Políticos, comerciantes, ganaderos y magnates de frontera siguen hoy usurpando estas tierras.