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El ministro de Hacienda, Benigno López, anunció ayer que la Presidencia de la República pondrá hoy a consideración del Congreso el proyecto de ley de reforma tributaria, para su estudio y aprobación.
Adelantó que se excluyó del plan la propuesta de gravar con el ISC los autos usados, las motocicletas y los autos nuevos con motor superior a 3.000 cm3, como en principio se había planteado en el último borrador manejado en el seno de la Comisión Técnica Económica Tributaria (CTET).
López argumentó que los autos usados son sacados del listado porque el fisco aún tiene espacio para aumentar los aranceles aduaneros, y en el caso de las motos, porque ya se aplicó en dicho sector un aumento importante el año pasado en materia de IVA.
Tabaco y bebidas suben
El ministro explicó respecto a los demás productos alcanzados por el impuesto selectivo que tendrán un aumento moderado de entre 20% y 22% sobre la tasas máximas vigentes, aunque no entró en detalles.
El proyecto anterior establecía tasas máximas de entre 3% hasta 50%, con importantes incrementos en el caso de tabaco, bebidas alcohólicas y azucaradas, lo que había generado el reclamo del sector privado y se constituyó en la traba para llegar a un acuerdo total sobre el proyecto de ley.
“No hubo una propuesta inicial. Ellos se volvieron locos nomás con el análisis que hizo Hacienda de hasta dónde se podría ir en un escenario ideal. El escenario que tenemos hoy, y posiblemente del año próximo, no es lo ideal”, dijo el ministro para argumentar la decisión final sobre el nivel de suba de las tasas del ISC.
Estas tasas, sin embargo, podrán ser elevadas apenas entre en vigencia la ley, porque se deja sin efecto la propuesta de un artículo que establecía que no se tocarían hasta después de un año de entrada en vigor (los empresarios habían pedido dos años), pero el ministro ratificó que sería de manera gradual y de acuerdo a la conyuntura económica del país, para no perjudicar las fuentes de trabajo.
Los demás
Las demás modificaciones de los impuestos se mantienen como en principio. Por ejemplo, se crea el impuesto a la renta empresarial para unificar el Iracis con el Iragro; se establece un impuesto a los dividendos y utilidades del 8% y 15%; el impuesto a la renta personal (IRP) con tasa de 8% para rentas y ganancias de capital, en tanto 8%, 9% y 10% por servicios personales.
No se firmó ningún pacto
La idea de firmar un pacto entre el Ministerio de Hacienda y el sector empresarial para impulsar la aprobación del proyecto de reforma tributaria y trabajar por la reforma del gasto público no había prosperado hasta ayer, ya que el sector privado no había respondido aún. El ministro de Hacienda, Benigno López, dijo que los empresarios debían evaluar el proyecto de ley por lo que el tema está en la cancha de ellos. Dejó en claro, sin embargo, que la firma de este pacto no es ningún requisito previo para enviar el proyecto de ley al Congreso.