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El secretario de Estado manifestó que se ha comunicado a RTA que están “listos” para iniciar las negociaciones. Dijo que solicitaron a los representantes de la transnacional que vengan con sus técnicos para que en un par de meses se puedan sentar a negociar los temas previstos para la primera etapa, consistentes en la provisión segura de la energía eléctrica, las cuestiones comercial, impositiva, medioambiental y el aspecto social, que es una de las cuestiones más importantes para el Gobierno nacional y la parte logística.
El ministro ratificó que el Gobierno nacional no regalará “absolutamente nada” a RTA, teniendo en cuenta que altos exponentes del Poder Ejecutivo anterior, con Ricardo Canese en la cabeza, insistían en que se le otorgaría un importante subsidio en materia energética. Precisamente, en cuanto a la tarifa a ser negociada, Rivas manifestó que todos los estudios pertinentes están hechos, aunque no mencionó cifra alguna, pero insistió en que “no se va a entregar subsidio a nadie”.
Valor agregado
Asimismo, el ministro resaltó que para el ETI y para el Gobierno nacional la de RTA “es una inversión conveniente”, siempre y cuando el aluminio que llegue a producir Rio Tinto, que es una materia prima para otras industrias, tenga un valor agregado en nuestro país en al menos un 50% de ese volumen.
El secretario de Estado afirmó que esa es la conversación previa que han tenido con los representantes de la firma extranjera, para que de esa forma se pueda crear, efectivamente, la mayor cantidad de puestos de trabajo. “Yo estoy seguro de que el parque industrial que se creará podría generar entre 40.000 y 60.000 nuevos empleos, y estaríamos utilizando nuestra energía en su justa medida, evitando el mal de la soja, que se exporta en estado natural”, subrayó.
Los efectos de la inversión
Según el jefe de la División de Balanza de Pagos y Economía Internacional del BCP, Dr. Miguel Ángel Argüello, durante la etapa de construcción, el proyecto Rio Tinto Alcan (2014-2016) crearía directa e indirectamente alrededor de 8.800 puestos de trabajo. Señaló, asimismo, que los salarios en forma directa representarían algo así como US$ 62 millones, e igual cantidad en forma indirecta. Es decir, sumarían unos US$ 124 millones. En cuanto a la operación de la planta, estimada para el 2016, se crearían en forma directa 1.250 puestos de trabajo, y en forma indirecta, 5.800. O sea, más de 7.000 puestos de trabajo, que representarían unos US$ 71 millones anuales, solo en concepto de salarios.