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La Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), del Ministerio de Hacienda, dio a conocer las modificaciones que se introducirán por decreto del Poder Ejecutivo a la reglamentación del IRP –vigente desde el 2012– y dentro del paquete se incluyen las “propuestas para una futura modificación de la ley”.
Entre las propuestas se mencionan establecer tasas progresivas para rentas del trabajo, tasas proporcionales para rentas del capital y gravar los ingresos en un 100%.
También, establecer deducciones proporcionales, de acuerdo con las condiciones personales por rangos de ingresos y retenciones en la fuente para todos los contribuyentes.
La ley actual fija para los contribuyentes del IRP dos tasas: 10% para los que tienen ingresos superiores a 120 salarios mínimos al año (G. 218.886.600) y 8% para los que ganan por debajo de este monto.
En lo que respecta a gravar los ingresos en un 100%, implicaría que con esta modificación se eliminarán las exoneraciones que existen en la ley vigente o gran parte, por lo menos.
La ley del IRP exonera las pensiones que reciben los veteranos de la Guerra del Chaco y sus herederos; las indemnizaciones y rentas provenientes de jubilaciones; los intereses, comisiones o rendimientos por inversiones, depósitos o colocaciones de capitales en entidades bancarias, cooperativas y financieras del país; las diferencias de cambio provenientes de colocaciones por depósitos en cuenta corriente o a plazo fijo en moneda extranjera; el aguinaldo, herencias, juegos de azar.
Sobre las retenciones, la legislación ya permite las retenciones en la fuente, que se da principalmente con extranjeros, por lo que se estima que se estaría más bien precisando para designar al empleador como agente de retención, en el caso del IRP.
La SET aún no fijó una fecha para llevar adelante esta modificación de la ley, ya que por ahora está embarcada en modificar primeramente la reglamentación por decreto del Ejecutivo.
Estos cambios serán para limitar las deducciones en renta neta por venta de inmuebles y otros bienes, a las inversiones, donaciones y gastos en el exterior; medidas que se habían establecido como mecanismo para formalizar la economía.
Además, el Gobierno de Horacio Cartes se había comprometido a no modificar los impuestos hasta el final de su mandato, en el 2018, pero, llamativamente, ahora apura los cambios.