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HUGUA RIVAS, Loreto (Aldo Rojas Cardozo, corresponsal). Según campesinos de la zona, varios productores que cultivaron locote afrontan pérdidas millonarias debido a la falta de venta de la verdura. Tras la primera cosecha registrada en noviembre de 2013, la venta fue importante y el locote se llegó a cotizar hasta en 3.000 guaraníes por kilo, pero la segunda cosecha ya no se pudo vender en grandes cantidades.
A pesar de que se llegó a vender en el mercado de abasto de Concepción, ubicado a unos 40 kilómetros, la comercialización fue insuficiente debido a que la producción estaba preparada con un promedio de 2.000 plantas por productor.
Actualmente miles de kilos de locote se encuentran pudriéndose en las chacras debido a la falta de mercado, lo que ha dejado como consecuencia una millonaria pérdida para los agricultores que apostaron a ese rubro.
Justiniano Rivas, uno de los mayores productores de locote del distrito de Loreto, dijo que en su chacra tiene 4.000 plantas de locote que no pudo vender, cada planta produce estimativamente 8 kilos. “La pérdida que tenemos es millonaria, el mercado en Asunción está abarrotado y nos quedamos con los locotes en nuestras chacras, esto se hace sin planificación, por eso se llega a esta situación”, se lamentó.
Agregó que los técnicos del Ministerio de Agricultura no asisten como debe ser a los campesinos, debido a que si los mismos realizaban bien su trabajo esta situación no la iban a soportar, sentenció.
“Aquí la gente comenzó a plantar masivamente el locote, pero al final no se tiene mercado”, comentó el productor, quien afirmó que una importante cantidad de agricultores ha quedado en su misma situación. “Solo porque tenemos otros cultivos estamos aguantando nuestros compromisos económicos, hay otras personas que solo plantaron tomates”, insistió Rivas.
Asimismo, el labriego lamentó las condiciones en que se encuentran los caminos que conectan a las comunidades rurales. “No podemos vender a buen precio nuestros productos porque los caminos que llegan a nuestras casas están en deplorables condiciones. Los compradores destruyen sus vehículos cuando ingresan a la zona”, afirmó.