Cargando...
CARMELO PERALTA, Dpto. de Alto Paraguay (Carlos Almirón, corresponsal). Los trabajos se iniciaron con unas pocas máquinas en los primeros días de diciembre del pasado año y a pesar de las lluvias que se registraron en la región, ya se logró avanzar más de 6 kilómetros de preparación de terreno para el futuro asfalto.
Estas nuevas máquinas que comenzaron a ser descargadas de la embarcación en el transcurso de la semana que fenece se sumarán a partir del lunes a los trabajos.
De esta manera, la construcción del asfaltado para unir a las comunidades de Carmelo Peralta (Alto Paraguay) y Loma Plata (Boquerón) en un tramo de 227 km comienza a ser una realidad largamente esperada por pobladores del Chaco y del estado de Mato Groso del Brasil.
A esta ruta denominada Bioceánica y que permitirá la integración comercial de países como Brasil, Paraguay, Chile y Argentina para agilizar el comercio por el Pacífico con el continente asiático, se le unirá la construcción del puente sobre el río Paraguay a fin de unir físicamente a nuestro país con el Brasil.
De acuerdo con los datos, esta pasarela será financiada por la Itaipú Binacional tras el acuerdo firmado recientemente entre los presidente Mario Abdo Benítez y Michel Temer.
En esta comunidad se puede visualizar el paso constante de las máquinas y los numerosos obreros que están participando de los trabajos de la obra vial.
El consorcio Corredor Bioceánico, integrado por la constructora Queiroz Galvao SA - Ocho A SA, es el encargado de esta colosal construcción que le adjudicó el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) el año pasado por un precio de US$ 443.473.727.
En principio, según los términos del contrato, los trabajos deben concluir en 40 meses, de no surgir inconvenientes que puedan justificar cualquier atraso. Esta obra de contrato de gran envergadura está regida bajo la ley 5074 llave en mano.
La construcción de 227 km de asfalto unirá a las poblaciones de Carmelo Peralta (Alto Paraguay) y Loma Plata (Boquerón) y permitirá al Alto Chaco tener su primer camino de todo tiempo. Una de las empresas que integra el consorcio contratista, Queiroz Galvao SA, fue denunciada e investigada en el Brasil y Perú por pago a políticos que favorecieron en licitaciones amañadas.