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Según el titular del Centro Azucarero Paraguayo, Conrado Hoeckle, el 80% del azúcar que se compra y consume en el país es de contrabando. A este análisis y conclusión llegó el gremio al observar el ingreso masivo de productos de contrabando, entre los cuales traen en grandes cantidades azúcar.
El empresario y directivo del ingenio Azucarera Paraguaya SA (Azpa) afirma que el porcentaje corresponde al azúcar de compra general (consumo masivo) y no al de uso industrial.
Hoeckle indicó además que la producción de este sector disminuyó considerablemente, en un 40%, y agregó que muchos ingenios tienen depósitos con mucha azúcar que no pueden comercializar por la oferta desleal del rubro en el mercado.
“La zafra disminuyó. Hay ingenios que, en comparación con años anteriores, están moliendo con la mitad de la capacidad sus establecimientos, incluso algunos no arrancaron”, agregó el empresario.
Mencionó que las acciones de combate al contrabando que se encuentra ejecutando el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) dan un aire esperanzador al sector, que aguarda una solución al tema.
Hoeckle añadió que unas 250.000 personas dependen de la producción de azúcar industrial nacional. Hizo hincapié en que se debe poner más énfasis en proteger al productor primario antes que evaluar la importación legal de azúcar.
Golpe
Entretanto, el presidente de la Cámara Paraguaya de Supermercados, Elzear Salemma, apuntó que la venta de azúcar en los supermercados bajó este año un 50%, dato que no pinta ni perfila un buen panorama en el sector comercial. Dijo que los productores locales también deben analizar mejor esta coyuntura, ya que la gente elige comprar azúcar ilegal, que le sale más barato, antes que el nacional.
Salemma sostiene que el despacho a pequeños importadores podría solucionar en parte esta problemática cuyas consecuencias tarde o temprano llegan a todos.