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El proyecto de reconversión del centro histórico de Asunción, que cuenta con financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), prevé la construcción de las nuevas sedes de cinco ministerios, además de un edificio para la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP) en un espacio de 55.000 metros cuadrados, de los 75.900 que se destinarán al sector público en la zona del puerto. Sin embargo, técnicos del sector consideran inviable el plan, por tratarse de una zona inundable.
El arquitecto Silvio Feliciángeli, miembro del Colegio de Arquitectos y de la Asociación de Arquitectos del Paraguay, dijo que el hecho de que el proyecto se va a ejecutar en una zona que es alcanzada cada año por las aguas del río Paraguay en época de crecientes, lo hace claramente inviable.
Considerando que la zona es inundable, construir por ejemplo los estacionamientos en subsuelo sería demasiado costoso, según Feliciángeli. A esto se suma la concentración de cinco ministerios que demandarán más lugares de estacionamiento que ningún otro sitio de la capital.
El plan se lleva adelante a tambor batiente y actualmente está abierta la convocatoria a un concurso de ideas para el diseño de las oficinas y para agosto debe elegirse ya el proyecto ganador.
Sin embargo, el plan maestro no forma parte del concurso y el ejecutor de todo el proyecto es el argentino Roberto Converti, un arquitecto cuya contratación es impuesta por el BID al Gobierno paraguayo.
Los ministerios cuyas oficinas serán construidas en el predio del puerto de Asunción son: Obras Públicas y Comunicaciones, Educación y Cultura, Ministerio de Hacienda, Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, y la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat).
Financiamiento
Aunque el BID impone sus condiciones, como la contratación del coordinador por ejemplo, el ente financia solo una parte del proyecto.
El presupuesto estimado para la construcción de las oficinas ministeriales hasta el momento es de US$ 55 millones, de los cuales US$ 20 millones son aporte del BID y los restantes US$ 35 millones son fondos de los ministerios.