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El problema se repetirá si no se invierte para cambiar los tubos que tienen medio siglo de antigüedad, advirtió el presidente de la Essap, Osmar Ludovico Sarubbi.
Una tubería de hierro fundido dúctil de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), que pasa por el Jardín Botánico, reventó el domingo a la noche a causa de la fuerte presión del agua y dejó sin el servicio, durante más de 14 horas, a alrededor de 100.000 personas (el 30% de sus usuarios) de 13 barrios de Asunción.
Desde la madrugada del lunes y todo el día de ayer la lluvia de quejas de los usuarios en las redes sociales y en los medios de comunicación contra la Essap fue torrencial. La interrupción del servicio afectó a los barrios Botánico, San Rafael, Loma Pytã, General Rodríguez, Trinidad, Ñu Guasu, Virgen de la Asunción, Mburucuyá, Cañada del Ybyray, Madame Lynch, Salvador del Mundo, Itay y San Jorge.
La pérdida económica por la no facturación ronda los G. 200 millones, mientras que en materiales y pago de horas extras alrededor de G. 30 millones.
Según el titular de la empresa del Estado, Osmar Ludovico Sarubbi, la aductora colapsó debido a la alta presión del agua dentro de la vieja tubería. “Es necesario que se cambien todas las tuberías viejas porque a medida que vaya pasando el tiempo se agudizará el problema. Acá no tenemos cultura de prevención, invertimos cuando ya ocurre la tragedia”, apuntó con cierta amargura.
Cerca del mediodía de ayer, los operarios seguían trabajando para reemplazar la tubería dañada. Lo notable es que trabajaban sin las más mínimas condiciones de seguridad. No tenían botas, cascos ni guantes y encima manipulaban soldadores eléctricos.
Para evitar nuevos cortes de este tipo es imperioso invertir en el cambio de las tuberías obsoletas, porque gran parte ya superó el límite de su vida útil. Tienen más de 50 años, explicó Sarubbi. Se quejó del Equipo Económico, que no da mucha importancia a los proyectos que presenta, aun cuando el propio presidente de la República, Horacio Cartes, recomienda priorizar las inversiones, tanto en el sector agua potable, así como en el del alcantarillado sanitario.
Por otro lado, comentó que el Banco Mundial puso a disposición de la Essap un crédito de US$ 300 millones para invertir en la construcción del cambio de redes y una nueva planta de tratamiento.
Estima que a mediados del próximo año estarán licitando el reemplazo de las cañerías viejas, la construcción de la planta en Arecutacuá, zona de Limpio, cerca del río Paraguay, y la elaboración del plan maestro.