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En ese sentido, la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP) advierte a los productores que tengan “mucha prudencia y no atropellen” con inversiones en la campaña agrícola que se inicia, según señaló su titular, el Ing. Agr. Héctor Cristaldo.
Explicó que la temporada que se inicia presenta mayores desafíos que de costumbre, porque dos de las tres principales variables que hacen al negocio de la oleaginosa no se muestran muy favorables a la rentabilidad.
“El precio pagado al productor por la soja, que se había ubicado en US$ 450 por tonelada, descendió a US$ 290 y, al mismo tiempo, los costos de producción de la oleaginosa subieron, disminuyendo sensiblemente la perspectiva de rentabilidad que se registró en años anteriores”, agregó.
Explicó que solo resta el clima, hasta el momento favorable, pero de ser adverso podría propiciar una situación económica crítica para el país, similar a la que ocurrió en del 2009. Propone a los productores que se atengan a criterios de buen manejo de cultivo, en el campo y en la administración, ya que los rendimientos bajos podrían generar pérdidas. Según MAG, en 2013/ 2014 la soja ocupó 3,5 millones de Ha., logrando 10 millones de Tn, al sumarse la zafriña.