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Por la rivalidad y jerarquía de ambos equipos, se esperaba una lucha mucho más pareja que la que se vio en el partido inaugural del Apertura 2014 en Tuyucuá. Sin embargo, solo el dueño de casa se puso a tono con el compromiso mientras que el conjunto aborigen mostró la peor imagen que se le haya visto en los últimos tiempos.
Lo malo se notó más en filas aurinegras en todo momento por la poca prolijidad de su juego, sin solvencia en defensa, sin consistencia en el mediocampo y sin peso alguno en ofensiva.
Por primera vez se puso en práctica la disposición de la APF, sin mucho fundamento por cierto, de que cada equipo obligatoriamente incluya en su once titular a un jugador de categoría Sub 20. El técnico de Guaraní puso ante dicha exigencia al juvenil Cristian Palacios, quien no estuvo a la altura y fue cambiado tempranamente en el primer tiempo. Dicha obligación condiciona a los técnicos a alistar a un juvenil en cada partido aunque no sea esa su intención, y además el juvenil que ingresa es prácticamente un cambio seguro, por lo que lejos de motivar al joven futbolista lo “queman” de la peor manera.
El juvenil gumarelo fue Iván Ramírez, cuyo desempeño no trascendió, pero se mantuvo en la cancha por 60 minutos. Libertad fue siempre más que Guaraní, con Rodrigo López movedizo y ambicioso en ataque y Jorge Recalde conduciendo los avances.
Un remate de Recalde que dio en el travesaño confundió al arquero Aguilar y López sobre la línea empujó la pelota a la red a los 21 minutos. A los 42’, un tiro libre de Recalde, y tras mala salida de Aguilar, terminó en tanto de Gustavo Gómez para sellar la victoria.