Un cero a cero deslucido resultó del encuentro entre vecinos de Luque. El más apremiado, Sportivo Luqueño, sigue sin poder levantar vuelo en el campeonato y el punto que ha sumado frente a General Díaz no le sirve de mucho.

Por el contrario, la posición del “General” es más cómoda y sumar un punto como visitante no le es despreciable, por lo que el equipo que dirige Humberto García salió más satisfecho con el marcador.

En el recuento de lo poco que se vio en el partido, sobresale el trabajo de General Díaz, que trató de jugar la pelota a ras del piso y tuvo mayor claridad en su juego.

En Luqueño se observaron muchos nervios y la ansiedad que produce en sus jugadores la mala situación por la que atraviesa el equipo. Eso se tradujo en errores defensivos y demasiados pelotazos, por lo que el juego auriazul nunca fue claro y menos convincente.

Uno de esos errores en la defensa luqueña, casi derivó en un gol tempranero para General. Un centro del volante izquierdo Diego Vera al segundo palo, cabeceó el pequeño Antonio Bareiro, ganándole al cierre del lateral Marcos Pereira. La pelota se estrelló en el travesaño, la jugada siguió y otro centro similar, volvió a cabecear Bareiro, convirtiendo el gol, pero la jugada fue invalidada por posición adelantada a los cinco minutos.

La acción más discutida del partido se produjo a los 37 cuando Elías Sarquis ganó la pelota dentro del área de Luqueño. El zaguero, Diego Viera llegó a destiempo y con su pierna derecha impactó de lleno en el cuerpo del delantero de General Díaz. No era cuestión de criterio sino de sancionar el penal. El árbitro, Ulises Mereles, no tuvo criterio ni el pulso necesario para marcar una clara falta dentro del área.

El esfuerzo de Juan Abente fue uno de los puntos rescatables en filas de Luqueño, además de la incisividad del puntero, Derlis Alegre. Pero con eso no le alcanzó al Auriazul. General Díaz estuvo más cerca de llegar al gol y en el mediocampo la batuta estuvo a cargo de Carlos Vera Segovia, de impecable gestión.

“Fuimos mejores, pero faltó el gol”

Con tranquilidad se recibió el empate en blanco en el sector de General Díaz. El entrenador, Humberto García, se mostró satisfecho con el trabajo de sus dirigidos, pero lamentó no haber podido llegar al gol.

“Fue un partido duro, como sabíamos que iba a ser frente a Luqueño. Ellos están más necesitados que nosotros y eso hace peligroso a cualquier adversario”, manifestó García tras el partido en Trinidad.

El mismo añadió: “El equipo cumplió con lo que planificamos. Creo que fuimos mejores que Luqueño en este partido, pero lastimosamente faltó el gol. Nosotros estuvimos más cerca y creo que hasta pudimos tener un penal a favor que no sancionó el árbitro. Pero sumamos un punto de visitante y eso es importante para no perder terreno”.

Por el lado de Luqueño nuevamente se escucharon quejas contra el arbitraje y luego del partido los hinchas asistentes pidieron la salida de dirigentes.