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Empezó mal el partido, con un penal cobrado por Julio Quintana, que no fue. Centro de Bonet, salto normal entre Patiño y Borja, caen ambos y el juez cobra una infracción inexistente, que Fabbro transformó en gol.
Casi no sintió el impacto Guaraní y Contrera empató el partido sobre los 9 minutos. El Legendario siempre estuvo mejor parado, fue más ordenado que su rival y sus ataques crearon enormes problemas a la última zona cerrista. A esta altura ya no se puede disimular lo mal que anda la defensa azulgrana y ante un equipo como el de anoche que tiene como mayor virtud su potencia en ofensiva, se vio en figurillas.
El segundo de Guaraní no tardó en llegar, siendo Palau el autor aprovechando un centro del chico Cáceres. Cerca del final de la etapa, Alex Cáceres anotó el tercero para Guaraní y sobre el final Rodrigo Rojas marcó el descuento de Cerro.
Valdez cometió una falta descalificadora y fue expulsado y Quintana completó su mala noche, no cobrando un penal sobre Borja.
En la complementaria, el ritmo intenso exhibido por ambos conjuntos en la primera decayó, pero la victoria de Guaraní nunca estuvo en peligro. Sobre el final Fernández, cuándo no, puso cifras definitivas marcando el cuarto para su equipo.
Queda una esperanza
Para el entrenador de Cerro Porteño, Roberto Torres, “la esperanza es lo último que se pierde”, cuando se le preguntó si el título del Clausura ya lo tenía perdido. El entrenador azulgrana añadió: “Soy el único responsable, queda claro que a nadie le gusta perder. Los cambios fueron tratando de cambiar el curso del partido. Solo queda felicitar al equipo por la entrega”, aseveró.
Acosta: “No les salió”
El presidente de Guaraní, Juan Alberto Acosta, dijo: “No hizo efecto la jugada de Zapag en la semana, cuando salió a reclamar la actuación de los árbitros. Nosotros tuvimos mucha contundencia y contra eso no se puede. No podemos hablar todavía de una clasificación a la Copa, porque primero debemos saber si Luqueño llega o no a la final de la Sudamericana”, aseveró.