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Sufrió Guaraní la marca a presión en la zona de gestación en los primeros 20 minutos. En ese lapso prácticamente todo fue de General Díaz, además cada centro sobre la valla aborigen significaba graves problemas para los centrales y ni que decir para el arquero Aguilar. Por dos veces, el delantero Julio Aguilar estuvo a punto de abrir el marcador a través de sendos cabezazos, pero en ambos se interpuso el golero local, desviando al córner.
Era fácil la tarea de anular a Camacho, el mayor creador de jugadas que tiene el Legendario, teniendo en cuenta que se juntaba muy arriba junto a Rodrigo López, sufriendo la marca escalonada de la visita. Pasado ese momento crítico y ayudado por el visible afloje en la marcación de la visita, Guaraní empezó a juntar sus dispersar líneas y se fue adelante con intenciones de abrir el tanteador. Los últimos 15 minutos fueron los mejores del aborigen en la primera etapa, por más que un par de veces se complicó la defensa y casi generó el gol visitante. Así se fue la etapa inicial sin abrirse el marcador.
En la complementaria, Guaraní empezó con mucho vértigo y tuvo mucho que ver el ingreso de Darío Ocampo. El objetivo era adquirir protagonismo y el plan surtió efecto enseguida con el estupendo gol de Camacho sobre los 8 minutos. Luego del tanto aborigen la defensa visitante se abrió permitiendo peligrosos contragolpes que pudieron terminar en la red, como la jugada al final en la que el recién ingresado Alex Cáceres eludió al arquero, pero no tuvo ángulo para definir. Así Guaraní triunfó y se aferra a la punta.
Tres goles valen nueve puntos
Néstor Abrahán Camacho (28 años) se convirtió en el hombre clave de Guaraní. El volante devenido delantero marcó tres goles en la misma cantidad de juegos (a Nacional, Libertad y General Díaz), que significaron nueve puntos para el “Cacique”.
El puntero del campeonato tiene la particularidad de que cinco de sus seis victorias en el Clausura fueron por 1-0. Su próximo rival será Luqueño.
El “Águila” no levanta vuelo
General Díaz está cada vez más comprometido con el descenso. El “Águila” de Luque no levanta vuelo y a su mal momento deportivo se agrega la inquietud de los vecinos del kilómetro 12, quienes no quieren que sea vendido el estadio “Adrián Jara”, tasado en nueve millones de dólares. La idea de las autoridades es trasladar la sede dentro de la misma ciudad (en Mora Cue).