El Sportivo se sacó la mufa de no ganar hace tiempo en su casa frente a Olimpia y cortó, además, el invicto del equipo decano en la era del DT Diego Alonso que llevaba cinco victorias y cuatro empates.
El juego auriazul tal vez no fue vistoso, pero el rendimiento y su victoria fueron a base de temperamento.
Olimpia ingresó bien al terreno, siendo fogoso y tratando de ser atrevido en su fútbol. Lo consiguió por algunos minutos, pero Luqueño consiguió la estabilidad y el juego se volvió parejo, con ambos equipos mostrando lo suyo. El Decano tuvo una sola ocasión de gol que la desperdició Jorge Báez.
Una buena llegada de Alegre y un gran remate de Vergara que tapó Centurión fueron acciones interesantes del local.
Un infracción de Benítez sobre Lequi y que Antonio Arias cobró penal acertadamente fue bien ejecutado por el mismo zaguero para el 1-0.
Luqueño cedió espacios a Olimpia que llegó en varias ocasiones, pero sin poder empatar el compromiso bien ganado por el local que puso más empeño y mística.