Si bien el partido fue entretenido desde el inicio, porque ambos equipos no están para especular resultados a esta altura, y en cada ataque quedaba la sensación de que en cualquier momento se venía el gol, recién en los tramos finales del cotejo se pudo vivir la emoción de los goles, y otras cosas que llenaron de nervios el escenario albiverde.
Rubio Ñu creó las más claras en la primera fracción mediante Jorge Benítez, quien la tiró afuera, y otra de Carlos Martínez, bien tapado por el golero Samudio.
Capiatá inquietó con centrazos, y con la velocidad de Romero, pero sin inquietar mucho a Servín.
Con Hugo Lusardi y Gustavo Viera, Rubio Ñu mostró un mejor fútbol en la etapa final, pero atrás sufrió con la contra rival, y se llenaron de amonestaciones, y por ende la expulsión de Velázquez.
Pero una genialidad de Lusardi abrió el marcador para los locales, pero la respuesta capiateña fue letal y lo igualó rápidamente con un remate esquinado de Óscar Ruiz, y cuatro minutos después, Blas Irala peinó el balón en el cobro de un tiro libre, que se metió por encima del golero Servín, quien quedó mal parado.
Todo eso se produjo en los últimos ocho minutos del partido, que concluyó no sin antes ser expulsados Hermosilla, de la visita, y Piris, del local, que sigue sin poder retomar su nivel anterior.
“Un buen paso”
No era para menos la gran alegría que generó en el plantel capiateño la victoria conseguida ayer ante Rubio Ñu. Era la primera en la categoría, y jugando de visitante.
“Es un buen paso para nosotros, ya que en el plantel hay muchos jugadores que tienen que acostumbrarse al nivel de Primera, y sin dudas ayuda para ir ganando confianza y ojalá podamos seguir por esta senda”, señaló con mucha tranquilidad el técnico Édgar “Araña” Denis.
Contento porque el triunfo nos va a dar la confianza que necesitamos para realizar nuestro fútbol”. Blas Irala