Olimpia y Guaraní protagonizaron un intenso primer tiempo, pero plagado de impresiciones. En ese primer acto las intenciones de ambos superaron al buen fútbol. El gol del Decano llegó muy pronto, sobre los 9 minutos. Un gran pase al vacío sobre la izquierda de Walter Clar para Derlis González, este que lleva un trecho el balón, se abre sobre su derecha dejando en el camino a Julio César Cáceres, y con remate fuerte y abajo al palo derecho de Joel Silva inaugura el marcador.

Guaraní trató de recuperarse del golpe que significó el gol en contra, teniendo la pelota y avanzando continuamente hacia la valla decana, pero esa situación solo sirvió para demostrar la impotencia adelante.

Olimpia, que pisó menos el área rival, estuvo más cerca de anotar otro gol. Sobre la mitad de la primera etapa por poco Derlis marcó de nuevo, pero no aprovechó el regalo de Bartomeus y su remate fue desviado al córner por el arquero Silva. Cerca del final del primer tiempo nuevamente los franjeados estuvieron cerca de la segunda conquista, pero el cabezazo de Rolón fue al poste derecho de Silva, salvándose los aurinegros de un gol que pudo haber sido devastador. El primer tiempo concluyó con Guaraní que atacó con asiduidad, pero sin inquietar mayormente a Centurión.

En la complementaria, el entrenador Jubero permitió el ingreso del colombiano Caicedo por el juvenil Sergio Mendoza, a fin de buscar mayor presencia en su delantera, tan inoperante en la primera etapa. Guaraní siguió apostando más al vértigo que a la jugada elaborada, y después de los 10 minutos tuvo su mejor momento en el partido.

La presión aborigen sobre el arco de Centurión fue creciendo y el empate rondaba la valla olimpista. La igualdad se produjo sobre los 29 minutos en una jugada de lujo, que empezó con el taquito de González Ferreira para Filippini, entrada profunda del lateral que envió un centro rasante al área franjeada, Caicedo deja pasar el balón que es conectado por el uruguayo Palau para emparejar el clásico más añejo.

“Mejor control”

Según el entrenador olimpista, Diego Alonso, el empate fue justo y recalcó que su equipo debe mejorar en el control del partido. “No tengo nada que reprochar a los jugadores, hicieron un esfuerzo bárbaro.

En un momento del partido no estuvimos justos en la marca, pero también es mérito de Guaraní, que posee un plantel de jerarquía y finalmente nos empataron”, aseveró.

El uruguayo cerró el diálogo, “si un jugador de mi equipo jugó mal pero puso actitud, le damos la derecha”.

“Mal arbitraje”

Para el volante de Guaraní, Jorge Mendoza “fue lamentable lo del árbitro, porque terminó el partido cuando teníamos un contragolpe a favor que pudo cambiar la historia. Sabíamos que Olimpia se iba a quedar en el segundo tiempo. De todas maneras levantamos nuestro nivel después de dos derrotas seguidas”.

Para el entrenador de Guaraní, Fernando Jubero, “esta noche mi equipo perdió dos puntos, teniendo en cuenta que Libertad ganó su encuentro”.