El gol conquistado por Raúl Piris, a los 24 minutos de la parte final, fue lo más destacado del encuentro vivido ayer en barrio Obrero, puesto que después el partido conoció de un trámite discreto y sin muchas emociones.
El equipo albo fue constante en sus intenciones de ser protagonista en la primera etapa. Tuvo el control del esférico, pero en forma irresoluta, puesto que no aprovechó para nada tener provecho de la pelota y de las llegadas.
El Azul no fue el equipo de otras fechas. Es evidente que pesaron las ausencias de Lorenzo Frutos, Marcos Duré y David Mendieta.
Vázquez fue el gladiador solitario, puesto que Rivas no aportó nada y al joven Enzo Prono hace tiempo que no lo tienen en cuenta.
En la etapa final se vio algo más de agresividad. En un gran entrevero en el área, Piris remató con fuerza e hizo el 1-0. La gente azul protestó por una supuesta mano previa de Angel Orué. Al final el albo salvó la tarde con desprolijidades.