Con sabor a un triunfo esquivo

La barriada de Trinidad vivió su clásico zonal, con las pasiones encendidas al rojo vivo. El equipo local, Trinidense, que sigue buscando su primera victoria en el campeonato, estuvo cerca de ganarle a Rubio Ñu, pero también de caer nuevamente, por lo que el empate sobre el epílogo del partido, le deja al “Triqui” al menos el sabor de un triunfo que le sigue siendo esquivo.

Uno y otro equipo se hicieron sentir frente al arco contrario y el tanto de apertura no tardó en llegar, en este caso, para la visita. Primer tiro de esquina para Rubio Ñu, ejecutado por Ángel Martínez y el zaguero, Diego Arrúa, elevándose por encima de todos, cabeceó a una esquina donde no llegó la estirada del arquero debutante en el “Triqui”, José Bogarín, a los 7 minutos.

No duró mucho la ventaja albiverde. También de un tiro de esquina de Nico Martínez vino la jugada del lateral David Mendoza, quien frente a Montiel enganchó y remató de derecha para vencer a Torresagasti.

El mismo Nico Martínez, tras habilitación de Teixeira, puso arriba a Trinidense con remate cruzado, dentro del área. El cuadro local ya amasaba la victoria parcial sobre el final del primer tiempo, cuando nuevamente Arrúa, en un segundo golpe de cabeza en el área, tras el primero de Galeano, anidó otra vez la pelota en el arco de Bogarín.

De nuevo Rubio Ñu golpeó primero en el segundo tiempo, con el expediente de las pelotas quietas, que era la fórmula más utilizada en un terreno de juego barroso. Achucarro puso la victoria en las manos de Rubio Ñu, aprovechando un rebote frente al arco. Pero la perseverancia premió a Trinidense, que igualó en el último minuto de adición, con un gran gol de Nico Martínez.

Incidentes por mala acción policial

Todo transcurrió normalmente durante el encuentro entre el Sportivo Trinidense y Rubio Ñu, con respecto a las hinchadas de uno y otro equipo.

Sin embargo, a la salida después del partido hubo una mala planificación de la Policía Nacional para evacuar convenientemente a los aficionados de ambos bandos.

Lo concreto fue, según expresiones de testigos, que la hinchada organizada de Rubio Ñu, debía salir de la zona del estadio por una calle alternativa y no por donde finalmente se desplazaron, ante nula custodia policial, encontrándose con los parciales del club local.

El resultado fue que se generó una minibatalla campal, cuando alguien del grupo de Rubio Ñu arrojó una piedra que hirió a la altura de la frente a un aficionado.

Muchas críticas se escucharon entre los hinchas del “Triqui”, con respecto a la Policía y a los llamados “antimotines”, cuyo trabajo dejó mucho que desear.

Almeida y Genes aceptaron resultado

Los técnicos de Trinidense y Rubio Ñu, Éver Almeida y Víctor Genes respectivamente, aceptaron el resultado de tres a tres, que se dio en el llamado clásico del barrio Trinidad.

En cuanto al partido y las condiciones del campo de juego, Almeida manifestó: “Fue un partido intenso, aunque se jugó mucho por arriba. Pero la cancha era para que se jugara de esa forma. Logramos ordenar un poco el juego del equipo, que hizo un buen partido. No se entregó ante el resultado adverso y creo que hubiera sido injusto que Trinidense perdiera el encuentro”.

Por su parte, Víctor Genes, refirió: “Nos duele el resultado, porque ya teníamos el triunfo en nuestras manos y se nos fue en la última jugada del partido”.

Asimismo, comentó: “Nosotros debíamos tener la pelota en nuestro poder en la parte final del partido, no apresurarnos. Caímos en eso y nos empataron”.