Cumpleaños del 1º de Marzo
Este meritorio club que milita en la Primera de Ascenso (actual División B) celebró 48 años de vida institucional. Fundado en 1963, en una naciente barriada, hoy populosa y residencial, fue creado para dar cabida a los deportes, respondiendo a la avidez de la juventud del vecindario. Y, en efecto, el 1º de Marzo del barrio Santa María de Fernando de la Mora cumple hasta hoy un rol social sumamente importante.
Es uno de los pocos clubes capitalinos que organizan permanentemente torneos de los que participan los jóvenes de la comunidad y de barriadas vecinas. Son tan atractivos, que muchas veces hasta de las ciudades vecinas han venido equipos a participar de sus espectaculares torneos, especialmente en el verano.
Como miembro de la Liga Paraguaya de Fútbol se mantiene dignamente, y habitualmente es uno de los que pelean el campeonato de la división, lo que le ha permitido ya ascender a la categoría superior, aunque haya sido muy difícil mantenerse.
Esteban Molinas, el legendario puntero de Olimpia conocido como "Chanfle" por sus espectaculares tiros libres, ha sido una de las figuras que marcó su impronta en el club, fundamentalmente como entrenador. Las instituciones barriales, como este 1º de Marzo son las que verdaderamente dan lugar a la juventud, tratando de apartarla de los vicios y de las drogas.
¡Felicidades, tricolores!
Capitán Figari y sus 80 años
Capitán Figari, afincado en Lambaré, cumplió en el Día de los Héroes 80 años de fundación, que se produjo en 1931, en lugar conocido como Valle Apuá de Lambaré, donde actualmente está afincado. Allí tiene su campo de deportes y una magnífica sede social, con una docena de salones comerciales sobre la populosa avenida Cacique Lambaré, lo que le da una buena renta para su propia manutención. Su primer presidente fue don Sinforiano Barrios.
Este club, que viste los colores blanco y rojo, como los de la Selección Nacional, es uno de los pocos que, además de los históricos del fútbol paraguayo, logró alcanzar el halago de jugar en Primera División, aunque no haya sido no más que una temporada. Sus primeros años fueron de vida barrial, ya que el fútbol se paralizó en el año 1932, cuando estalló la Guerra del Chaco, y las competiciones oficiales no se reanudaron sino en 1935.
Comenzó como miembro de la Liga Lambareña, para luego inscribirse en la 2ª de Ascenso de la Liga Paraguaya de Fútbol, durante la presidencia de Juan B. Ruiz Díaz, que de dirigente de Sol de América pasó a serlo del Capitán Figari, cuando mudó su mueblería, que estaba sobre Teniente Fariña e Iturbe, a Lambaré. Esto ocurría en 1978 y fue el primer club de la UFI en pasar a engrosar la nómina de clubes de la LPF.
Ese mismo año sale campeón de la segunda y al año siguiente de la Primera de Ascenso, y meteóricamente se ubicó entre los privilegiados de la división de honor, en 1980, aunque al año siguiente volvió a descender y hoy sigue en su "hábitat" natural, la 2ª de Ascenso. Sus fundadores le pusieron el nombre de Capitán Figari, en homenaje a un héroe de la guerra. Con justicia el estadio lleva el nombre de quien labró la grandeza del club, don Juan B. Ruiz Díaz.
Los lambareños celebran pues con alborozo el cumpleaños de uno de sus dilectos hijos deportivos.
En 1925 se registraba el nacimiento de Cerro Corá
Todavía bajo los influjos de la Guerra Grande, el Paraguay trataba de reconstruir su vida institucional, a pesar de que las asonadas, revoluciones, golpes y contragolpes, no permitían que la democracia creciera en paz. Los días aciagos de la revolución de 1922 habían terminado, pero cierta incertidumbre no permitía pacificar del todo a la república. Para colmo, la amenaza boliviana de invadir nuestro país estaba cada vez más latente.
En ese marco, jóvenes vecinos de un barrio recientemente creado, el hoy conocido como Campo Grande, que formaba parte de ese enorme Ñu Guazú que se extendía hasta Luque y Mariano Roque Alonso, decidieron acoplar sus esfuerzos a muchos otros que en diferentes barriadas, se agrupaban para fundar un club de fútbol. Así nació Cerro Corá, afincado en Campo Grande, donde poco después le seguirían otros clubes como el General caballero y el Independiente.
La fecha elegida para la fundación fue el 1 de marzo de 1925, y el nombre seleccionado, "Cerro Corá", para hon- rar, deporte mediante, la memoria del glorioso Mariscal López. Su primer presidente fue José Macias, con cuyo esfuerzo y el de sus jóvenes compañeros, consiguieron darle vida.
Sin embargo, los éxitos tardaron en llegar. Recién en 1956 alcanzó su primera conquista con lo que permaneció en la Primera de Ascenso hasta que de nuevo rodó cuesta abajo, en 1968, para regresar en 1975 y durante 15 años, batallar en busca del ascenso a la división de honor. Los nuevos vientos que soplaron tras el derrocamiento de la dictadura coincidieron con la época más feliz de Cerro Corá, que en 1990 subió a primera y ya en su primer campeonato, lograba el título del Torneo República y su paso por la Copa Libertadores.
Durante varios años fue animador ponderable del fútbol de primera, hasta que de nuevo le tocó caer hasta lo más profundo, y hoy pugna por volver a la División Intermedia. Hicieron mucho por el club los militares de la Caballería, hasta que esa división fue desintegrada.
Eumelio Ramón Palacios y Sergio "Patú" Fernández son algunas de las figuras que brillaron en el club, fundamentalmente a su paso por la división de honor, y las selecciones paraguayas de menores y de primera.
Al cumplir el 1 de marzo pasado 87 años de vida institucional, nuestras congratulaciones a la gran familia del rojinegro Cerro Corá de Campo Grande.
Este meritorio club que milita en la Primera de Ascenso (actual División B) celebró 48 años de vida institucional. Fundado en 1963, en una naciente barriada, hoy populosa y residencial, fue creado para dar cabida a los deportes, respondiendo a la avidez de la juventud del vecindario. Y, en efecto, el 1º de Marzo del barrio Santa María de Fernando de la Mora cumple hasta hoy un rol social sumamente importante.
Es uno de los pocos clubes capitalinos que organizan permanentemente torneos de los que participan los jóvenes de la comunidad y de barriadas vecinas. Son tan atractivos, que muchas veces hasta de las ciudades vecinas han venido equipos a participar de sus espectaculares torneos, especialmente en el verano.
Como miembro de la Liga Paraguaya de Fútbol se mantiene dignamente, y habitualmente es uno de los que pelean el campeonato de la división, lo que le ha permitido ya ascender a la categoría superior, aunque haya sido muy difícil mantenerse.
Esteban Molinas, el legendario puntero de Olimpia conocido como "Chanfle" por sus espectaculares tiros libres, ha sido una de las figuras que marcó su impronta en el club, fundamentalmente como entrenador. Las instituciones barriales, como este 1º de Marzo son las que verdaderamente dan lugar a la juventud, tratando de apartarla de los vicios y de las drogas.
¡Felicidades, tricolores!
Capitán Figari y sus 80 años
Capitán Figari, afincado en Lambaré, cumplió en el Día de los Héroes 80 años de fundación, que se produjo en 1931, en lugar conocido como Valle Apuá de Lambaré, donde actualmente está afincado. Allí tiene su campo de deportes y una magnífica sede social, con una docena de salones comerciales sobre la populosa avenida Cacique Lambaré, lo que le da una buena renta para su propia manutención. Su primer presidente fue don Sinforiano Barrios.
Este club, que viste los colores blanco y rojo, como los de la Selección Nacional, es uno de los pocos que, además de los históricos del fútbol paraguayo, logró alcanzar el halago de jugar en Primera División, aunque no haya sido no más que una temporada. Sus primeros años fueron de vida barrial, ya que el fútbol se paralizó en el año 1932, cuando estalló la Guerra del Chaco, y las competiciones oficiales no se reanudaron sino en 1935.
Comenzó como miembro de la Liga Lambareña, para luego inscribirse en la 2ª de Ascenso de la Liga Paraguaya de Fútbol, durante la presidencia de Juan B. Ruiz Díaz, que de dirigente de Sol de América pasó a serlo del Capitán Figari, cuando mudó su mueblería, que estaba sobre Teniente Fariña e Iturbe, a Lambaré. Esto ocurría en 1978 y fue el primer club de la UFI en pasar a engrosar la nómina de clubes de la LPF.
Ese mismo año sale campeón de la segunda y al año siguiente de la Primera de Ascenso, y meteóricamente se ubicó entre los privilegiados de la división de honor, en 1980, aunque al año siguiente volvió a descender y hoy sigue en su "hábitat" natural, la 2ª de Ascenso. Sus fundadores le pusieron el nombre de Capitán Figari, en homenaje a un héroe de la guerra. Con justicia el estadio lleva el nombre de quien labró la grandeza del club, don Juan B. Ruiz Díaz.
Los lambareños celebran pues con alborozo el cumpleaños de uno de sus dilectos hijos deportivos.
En 1925 se registraba el nacimiento de Cerro Corá
Todavía bajo los influjos de la Guerra Grande, el Paraguay trataba de reconstruir su vida institucional, a pesar de que las asonadas, revoluciones, golpes y contragolpes, no permitían que la democracia creciera en paz. Los días aciagos de la revolución de 1922 habían terminado, pero cierta incertidumbre no permitía pacificar del todo a la república. Para colmo, la amenaza boliviana de invadir nuestro país estaba cada vez más latente.
En ese marco, jóvenes vecinos de un barrio recientemente creado, el hoy conocido como Campo Grande, que formaba parte de ese enorme Ñu Guazú que se extendía hasta Luque y Mariano Roque Alonso, decidieron acoplar sus esfuerzos a muchos otros que en diferentes barriadas, se agrupaban para fundar un club de fútbol. Así nació Cerro Corá, afincado en Campo Grande, donde poco después le seguirían otros clubes como el General caballero y el Independiente.
La fecha elegida para la fundación fue el 1 de marzo de 1925, y el nombre seleccionado, "Cerro Corá", para hon- rar, deporte mediante, la memoria del glorioso Mariscal López. Su primer presidente fue José Macias, con cuyo esfuerzo y el de sus jóvenes compañeros, consiguieron darle vida.
Sin embargo, los éxitos tardaron en llegar. Recién en 1956 alcanzó su primera conquista con lo que permaneció en la Primera de Ascenso hasta que de nuevo rodó cuesta abajo, en 1968, para regresar en 1975 y durante 15 años, batallar en busca del ascenso a la división de honor. Los nuevos vientos que soplaron tras el derrocamiento de la dictadura coincidieron con la época más feliz de Cerro Corá, que en 1990 subió a primera y ya en su primer campeonato, lograba el título del Torneo República y su paso por la Copa Libertadores.
Durante varios años fue animador ponderable del fútbol de primera, hasta que de nuevo le tocó caer hasta lo más profundo, y hoy pugna por volver a la División Intermedia. Hicieron mucho por el club los militares de la Caballería, hasta que esa división fue desintegrada.
Eumelio Ramón Palacios y Sergio "Patú" Fernández son algunas de las figuras que brillaron en el club, fundamentalmente a su paso por la división de honor, y las selecciones paraguayas de menores y de primera.
Al cumplir el 1 de marzo pasado 87 años de vida institucional, nuestras congratulaciones a la gran familia del rojinegro Cerro Corá de Campo Grande.