Falleció Neneco Norton

El gran músico Neneco Norton falleció ayer en el hospital geriátrico del Instituto de Previsión Social, donde se encontraba internado desde hace dos meses.

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Había ingresado al hospital con un grave cuadro de neumonía y fue internado en Terapia Intensiva.

Neneco Norton había cumplido 89 años el pasado 8 de diciembre. Su verdadero nombre era Elio Ramón Benítez.

Don Neneco nació en Asunción y hace más de 30 años vivía en la ciudad de Lambaré. Se inició musicalmente en la banda del batallón Rojas Silva del Salesianito ejecutando la trompeta. Sus lecciones de teoría y solfeo elemental las tomó con el padre Ernesto Pérez, el recordado y famoso Pa’i Pérez. Posteriormente, aprendió teoría y solfeo superior con el maestro José de Jesús Villalba, para luego seguir cursos de armonía con el profesor Otakar Platill.

Estando en el batallón Rojas Silva, formó un grupo musical integrado por los scouts, siendo sus integrantes el cantante Luis Osmer Meza –quien posteriormente sería el famoso Luis Alberto del Paraná–, Rubito Medina en la guitarra, y el clarinetista Benjamín Cabañas.

Obtuvo el título de profesor superior de teoría y solfeo en el conservatorio Jorge Báez. Ya inserto en la carrera de la música, forma su propia orquesta: Los Caballeros del Ritmo. Con la banda realiza giras por todo el territorio paraguayo, así como por ciudades de la Argentina, Brasil y Uruguay.

Norton es autor de una de las canciones paraguayas más difundidas, “Paloma blanca”. Este tema ha sido grabado por innumerables intérpretes nacionales e internacionales, como el español Julio Iglesias.

Posee una larga carrera en el campo de la composición, dirección orquestal y los arreglos musicales. Sus creaciones van desde las mencionadas canciones hasta piezas con ritmos de chachachá, canciones, boleros, guaranias y polcas. Es autor de unas 84 composiciones, algunas de ellas son guarania, como “Aquel ayer”, “Tus ojos” y “Buscándote”.

Ha desarrollado gran parte de su carrera con las zarzuelas paraguayas, como “Reseda”, “Naranjera”, “Urutau” (todas con libreto de Alcibiades González Delvalle) “La promesera de Caacupé” (con Mario Halley Mora), “Marido de contrabando” y otras, siendo el Teatro Municipal su ámbito por excelencia y escenario de sus más grandes éxitos.

Otras puestas que fueron musicalizadas por él son “Ribereña”, “El arribeño“, “La morena del trigal”, “El delegado”, “Cañaveral”, “Marido de contrabando”, “El gringo de la loma”, “La calandria de mi barrio”, “Los compadres en Itaipú”, “Mburucuyá”, entre otras.

Sus restos son velados en Portal La Piedad (Sacramento 936 esq. Walt Disney). El sepelio se realizará esta tarde, hacia las 17:00, en el Parque Serenidad de Villa Elisa.

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