Romero, de 23 años e integrante de la selección guaraní, se convirtió así en el jugador extranjero más destacado de la jornada, en la que Boca Juniors se coronó campeón argentino.
La historia arranca desde el legendario artillero y eximio cabeceador de Independiente Arsenio Erico en la década de los años 30 y 40 y tuvo como ídolo en los 90 al arquero-goleador José Luis Chilavert (San Lorenzo y Vélez Sarsfield) , entre decenas de compatriotas suyos muy valorados.
Romero envió el tiro de esquina que propició el primer gol de Diego Milito y asistió para el tercer tanto de la ’Academia’ con un exquisito pase bombeado, además de originar el segundo tanto, anotado por Leandro Grimi.
“Es un jugador diferente, de jerarquía, que nunca puede empezar en el banco de suplentes. El paraguayo condujo con su zurda hábil, con personalidad. El enganche se luce como nunca. Marca los ritmos del partido y lo aplauden todos” , lo elogió el matutino Clarín.
En el mismo partido, el uruguayo Washington Camacho también cumplió una buena tarea en el mediocampo y el guaraní Carlos Núñez volvió a jugar después de siete meses, recuperado de una grave lesión, mientras que por Crucero el paraguayo Gumersindo Mendieta tuvo una noche intrascendente.