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El Defensores del Chaco albergó una vez más el duelo entre los clásicos rivales del balompié nacional. Cerro Porteño y Olimpia se enfrentaron en la fecha 17 del Apertura en medio de un poco habitual para lo que suele rodear este juego. Graderías Norte, caracterizada por ser el corazón de la hinchada azulgrana, no estuvo habilitada.
Cerro Porteño, animado por su clasificación a los octavos de la Copa Libertadores, y con el deseo de escalar en la tabla del torneo local, recibió a un Olimpia goleador y que buscó la novena victoria seguida y presionar al líder Sol de América.
En los primeros minutos, el cuadro decano estuvo más preciso y mejor parado en el campo de juego. Al Ciclón le costó hilar pases y esperó al rival. Ya a los 4’, un contragolpe azulgrana estuvo cerca de romper la paridad pero Julio Villalba no supo definir frente a Diego Barreto.
La primera acción polémica se produjo en el área cerrista en la siguiente jugada. Luego de una triangulación estupenda, en la que quedó pagando la defensa local, Julián Benítez se metió en el área, Antony Silva intentó cortar y el delantero se cayó. Para el árbitro Marcos Galeano no fue penal.
Olimpia estuvo guiado por la imaginación de William Mendieta, el fútbol se hizo cortado pero agradable. Un disparo de Jonathan Fabbro rozó el travesaño decano y a los 23’, de pelota parada, José Leguizamón rompió la paridad. El centro fue enviado por Mendieta, el zaguero conectó sin marca alguna y la hinchada de Graderías Sur estalló.
Fabbro estuvo activo y buscando meter pases filtrados. El elenco de Barrio Obrero redujo el dominio decano, continuó impreciso y no pudo emparejar el marcador. Olimpia se sintió cómodo con el trámite del compromiso aunque por momentos sufrió las aceleraciones de Jorge Rojas. De balón parado el Ciclón también casi anotó, mas Barreto fue el responsable de mantener la ventaja franjeada.
El complemento inició sin mucha intensidad y con mucha desprolijidad en ambos equipos. La pelota quieta estuve cerca de sonreír nuevamente a Olimpia ya que Fredy Bareiro se encontró con un balón dentro del área y sacó un tiro débil.
En medio de la obligación, Cerro Porteño se instaló en terreno decano y produjo algunas acciones en ataque. Este panorama prevaleció hasta el minuto 59’, momento en que Guillermo Beltrán recibió su segunda tarjeta amarilla y dejó a su equipo con 10 jugadores.
Olimpia sintió alivio y adelantó más sus líneas. A los 67’, Mendieta ratificó su gran actualidad anotando de manera exquisita el segundo gol decano. Un error de Fidencio Oviedo le obligó a Bruno Valdez a parar con falta al propio Mendieta quien se encargó de la ejecución.
Con el 2-0 en contra, y con un hombre menos, el cuadro azulgrana quiso descontar y ofreció espacios en el fondo. Robert Piris Da Motta estuve cerca de ampliar la ventaja a los 69’ y Blas Riveros a los 74’.
El elenco decano creció y jugó con la desesperación cerrista. El ingreso de Cecilio Domínguez le dio vida y esperanza al conjunto de Barrio Obrero. En su primera acción ya movió el tanteador luego de aprovechar una guapeada de Luis Leal. El explosivo atacante puso el descuento a los 79’.
Olimpia no asimiló el golpe, Domínguez contagió a sus compañeros y por poco volvió a sacudir el tanteador a los 81’. Su remate rozó el poste izquierdo de Barreto. El onceno franjeado fue confusión y la victoria, que parecía asegurada, tambaleó con cada avance azulgrana pero se confirmó luego del pitazo final de Galeano.
Olimpia sigue su marcha hacia la cima, ahora tiene 31 unidades y presiona al líder Sol de América. En la siguiente fecha recibirá a Sportivo Luqueño y buscará hilar la victoria 10. Cerro Porteño cayó antes del juego copero y se quedó muy relegado de las principales posiciones con 23 puntos. Luego de medir a Boca Juniors, deberá visitar a Sol de América.