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Luego de mucho, el Defensores del Chaco volvió a vestirse de gala para recibir a una multitud que colmó el estadio con los colores de los eternos rivales: Olimpia y Cerro Porteño. El primer tiempo estuvo acorde a lo esperado, fue entretenido, quizás sin la dinámica esperada, pero cada jugada vivida con intensidad y con la emoción a flor de piel.
Los primeros minutos fueron de bastante estudio, sin arriesgar demasiado, aunque se vio una leve superioridad en actitud de Olimpia. Cerro no tuvo mucho protagonismo, pues Jonathan Fabbro y Sergio Díaz no tenían mucho contacto con el balón, como sí lo hacía Juan Manuel Salgueiro, quien estaba incisivo al principio.
Justamente Salgueiro, a los 10', creó al primera sensación de peligro con centro al arco, que fue despejado rápidamente por Diego Barreto, ya que venía atropellando Carlos Rolón. Dos minutos después el Decano estuvo cerca de ponerse adelante en el marcador en una jugada casi desafortunada para Bruno Vadez, quien en su intención de despejar el centro rasante de Jorge Salinas, no hizo otra cosa que mandar el balón hacia su portería, pero gracias a su velocidad terminó salvando sobre la línea.
De a poco el azulgrana comenzó a crecer en su juego y fue más que el franjeado. A los 14 minutos, en una de las primeras llegadas con profundidad ya golpeó duro el arco de Cristian Campestrini. Tras una magnífica escapada y una cesión perfecta de José Ortigoza, el “niño maravilla”, de Cerro Porteño, Sergio Díaz, definió de zurda con una increíble tranquilidad, a un costado del desesperado portero decano que había salido a querer achicar el ángulo de remate.
Tras el gol inicial, el Ciclón fue aún más superior y a los 20' tuvo para aumentar el marcador, pero un espectacular Cristian Campestrini tapó increíblemente cuando ya se había jugado al otro costado del remate de Sergio Díaz, siempre protagonista en cada ataque del azulgrana.
Momento después, el niño travieso de Cerro Porteño tuvo en sus pies una situación clarísima de gol, pero su remate frente al arco tras desborde de Bonet pasó rozando el palo izquierdo del arco franjeado.
Olimpia se mostraba totalmente confundido. William Mendieta era uno de los pocos que se animaba para crear e intentar avanzar, ya que Salgueiro estaba oculto en una de sus lagunas futbolísticas. A los 33', Iván Torres ensayó un remate de derecha, pero sobre el travesaño. Ya sobre el final del primer tiempo el equipo de Arce creó la mejor chance para empatar: tras habilitación de Mendieta, Acuña define de puntín en el área, pero Barreto achicó de gran forma y tapó el remate.
En el inicio de la complementaria, Olimpia fue demoledor y mostró una superioridad muy marcada, asfixiando a Cerro Porteño en su arco. El Ciclón había perdido fantasía, pues “Tiburón” Torres había sacrificado a Sergio Díaz para dar lugar a Blas Cáceres, con la intención de fortalecer el mediocampo. Esto no ocurrió, ya que el Decano se impuso en ese sector.
Apenas iniciado, Jorge Salinas estrelló un cabezazo en el palo izquierdo de Diego Barreto y Olimpia ya avisaba sobre su propuesta. Luego, Mendieta atropelló en el medio del área, tras desborde de Salinas, pero su remate pasó sobre el travesaño.
El Decano siguió teniendo el domino del juego, pero con el correr de los minutos pareció perder entusiasmo y Cerro supo que era su momento para comenzar a resurgir. A los 58', José Ortigoza se aguantó a dos defensores rivales y sacó un remate en la entrada del área, activando los grandes reflejos de Campestrini, siempre atento y seguro.
Si bien Olimpia tenía en mayor medida el dominio del balón, el azulgrana era más peligroso de contragolpe. A los 72', Bruno Valdez casi anota con un cabezazo y un minuto después, tras una brillante jugada personal, Cecilio Domínguez definió colocado de zurda y la pelota fue devuelta caprichosamente por el travesaño.
Sobre el final, el equipo de Francisco Arce fue más desesperación que otra cosa, pero presionaba con mucho corazón y el tanto insistir tuvo su recompensa a tres minutos del final, cuando Cristhian Ovelar definió cayéndose en el área, tras centro desde la derecha de Jorge Salinas para poner el 1-1.
Con el empate, Cerro Porteño vuelve a ser líder solitario del torneo con 39 puntos, uno más que Guaraní, mientras que Olimpia acumula 27 unidades y se acomoda en la cuarta ubicación de la tabla.