Al llegar a mi casa del trabajo, me encontré con una tremenda sorpresa al pasar frente a este sitio. Un indigente había hecho del basurero su hogar, mientras en la iglesia se daba la misa, el estaba haciendo fuego en medio de la calle, ante la mirada de todos los fieles que solo murmuran entre ellos al verlo pasar.

Realmente me quedo sin palabras, en la ciudad donde un candidato liberal ha empapelado con sus nombres las calles, columnas, murallas, etcétera y donde cuando te visitan sus operadores te venden el sueño de que un villaeliseño sea Presidente de la República.

Ver una imagen como la que adjunto te da mucho que pensar.

Disculpen la falta de claridad de la foto, pero la tomé con mi celular y no capta muy bien en las noches.

El hombre es un anciano como de 70 años. La Iglesia debería ser verbo y no sustantivo, la imagen muestra todo lo contrario.

Claudia