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El Proyecto de investigación “Elaboración de bloques ecológicos fabricados a partir del reciclaje de plásticos PET, para la construcción de viviendas económicas” presentó sus resultados días pasados en la Facultad Politécnica de la Universidad Nacional de Asunción (FP-UNA).
A través de esta investigación se desarrolló una formulación para elaborar bloques utilizando materiales reciclados de tereftalato de polietileno (más conocido por sus siglas en inglés PET, polyethylene terephthalate) que cumplen con las normas del Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN).
En la ocasión también fue inaugurado el laboratorio de Ecomateriales, cuya construcción y equipamiento formaron parte de la ejecución del proyecto.
A través de los primeros ensayos fue posible definir las proporciones de mezclas y se resolvió considerar la misma con matriz de tierra. En esta fase final fueron realizados los ensayos mecánicos, necesarios para validar la fabricación de los ladrillos, en lo que respecta al comportamiento mecánico.
De acuerdo a los resultados obtenidos en los ensayos de resistencia a compresión y humedad fue posible clasificar el ladrillo fabricado en la categoría “C” conforme a la Norma Paraguaya para fabricación de ladrillos NP 17 0277, por su menor granulometría de PET y una resistencia de aproximadamente 5 MPa (MPa: Mega Pascal = 10,19 Kgf/cm2.
La norma paraguaya para ladrillos requiere 5 MPa como resistencia mínima para ladrillos de categoría C, en ese contexto, el equipo de investigación utilizó la misma como referencia para la evaluación de la resistencia a la compresión.
El equipo de investigadoras está compuesto por la Prof. MSc. Delia Cohenca, responsable técnico; la MSc. Belén Martínez Pavetti, Jefa del Laboratorio Ecomateriales; la Dra. Magna Monteiro del Núcleo de Investigación y Desarrollo Tecnológico de la FP-UNA NIDTEC; y las estudiantes Ángela Corvalán y Andrea Maldonado, de la carrera de Ingeniería en Ciencias de los Materiales de la FP-UNA, quienes desarrollaron su tesis de grado en dicho Laboratorio.
El proyecto fue financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) a través del programa PROCIENCIA. Es una investigación asociativa, ejecutada por el Centro de Investigación en Matemática – CIMA y la FP-UNA.