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El fiscal Sergio Alegre tiene la causa por enriquecimiento ilegítimo; su colega Victoria Acuña, el caso de uso de fondos sociales para solventar la campaña del Partido Colorado en las elecciones generales de 2008; Eduardo Cazenave, por sobrefacturaciones, y Silvia Cabrera indaga el vaciamiento de la Fundación Tesãi.
Ante las críticas al poco avance de los procesos, los agentes del Ministerio Público alegan que las causas son muy complejas y se tienen muchos documentos para analizar.
Alegre ya había intentado “archivar” la causa por enriquecimiento ilícito, pero el “blanqueo” de Bernal pudo evitarse cuando el juez Rubén Ayala Brun le dio trámite de oposición a su pedido. El fiscal adjunto de Delitos Económicos, Carlos Arregui, dijo que Alegre tenía que seguir indagando y le designó de nuevo el caso, en donde hasta ahora no se tiene ninguna novedad.
La dilación de la fiscala Acuña es muy sugestiva. Se presume que ella ya reunió todos los elementos que hacen suponer la implicancia de Bernal en el uso irregular de los fondos sociales, específicamente para solventar la campaña electoral de Blanca Ovelar y Carlos María Santacruz, entonces candidatos presidenciales. Este caso no es muy complejo, pero Acuña, hasta ahora, no toma ninguna determinación. Esta situación genera dudas sobre su actuación.
No se puede desconocer el poder económico y también político de Bernal, que mucho podría influir en el ánimo de los investigadores.
Se puede entender que no es fácil llevar adelante investigaciones contra los “peces gordos”, pero no se puede admitir que las averiguaciones duren tanto tiempo. Es necesario que se llegue a una conclusión, sobre todo atendiendo a las graves acusaciones que pesan contra el ex director de la binacional.
Cazenave sustituyó a Gustavo Gamba, quien fue filmado cuando pedía una coima a Bernal para desestimar su causa. Cazenave es amigo de la jueza Patricia González, quien tiene a su cargo el proceso a Bernal por la sobrefacturación de obras en Minga Guazú.
Roberto Melgarejo, marido de la jueza González, es a su vez amigo de Bernal, y se habla de que se estaría negociando para “blanquear” al director de Itaipú. Cazenave aseguró que sigue con las averiguaciones contra el senador colorado, cuyo pedido de desafuero sigue congelado en el Poder Judicial.
Cabrera tiene el caso de la Fundación Tesãi, que se habría usado para “vaciar” Itaipú.
Cabrera explicó que investiga cinco años de gestión en la fundación y que hay un cúmulo de documentos que se están cotejando, y sobre la base de los resultados se requieren nuevos informes. Afirmó que la causa es muy compleja y que por eso se dividió en 18 puntos.
El fiscal adjunto Carlos Arregui debería revisar la actuación de cada uno de los agentes que indagan los casos de Bernal.
No se puede pretender que lo haga el fiscal general, Rubén Candia Amarilla, quien, además de ser correligionario de Bernal, estaría operando para su “blanqueo”.