El Domingo de Ramos es una celebración muy importante dentro de la tradición católica, con la que se conmemora la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén antes de su pasión, muerte y resurrección. Este ritual marca el inicio de la Semana Santa y tiene gran simbolismo en la religiosidad católica.
El cura rector del Santuario Nuestra Señora del Rosario, monseñor Enrique Meyer, comentó que se hará un recorrido de unas tres cuadras de forma procesional durante el cual los devotos con sus ramos de palmas y olivos bendecidos en manos recrearán el fervor popular expresado hacia el Mesías en su entrada triunfal a Jerusalén.
El acto concluirá en la explanada central de la parroquia Nuestra Señora Del Rosario. Esta primera celebración dará paso a una serie de eventos religiosos y culturales que se desarrollarán en los días subsiguientes, mencionó.
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Calendario de actividades para la Semana Santa
-Viernes de Dolores, 22 de marzo: Vía Crucis humano desde la avenida Córrales a partir de las 20:00.
-Martes Santo, 26 de marzo:c elebración penitencial del perdón y confesiones, desde las 20:00.
-Jueves Santo, 28 de marzo: lavatorio de los pies, a las 19:00.
-Viernes Santo, 29 de marzo: misa de las 7 Palabras, a las 14:00. Pasión de Cristo crucificado, a las 15:00.
-Sábado Santo, 30 de marzo: Vigilia Pascual, a las 21:00.
-Domingo de Resurrección, 31 de marzo: misa a las 08:00, 10:00, 17:30 y 19:00.
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Historia del templo Nuestra Señora del Rosario
El Santuario ecológico de la ciudad de Luque, erigido en las intersecciones de las calles Virgen del Rosario y Cerro Cora, era una pequeña capilla construida de karanda’y en el año 1750. Desde su fundación fue consagrado bajo la advocación de la Virgen del Rosario, protectora de la comunidad católica luqueña.
Según recopilaciones históricas del licenciado Martín Ocampos, la construcción estuvo a cargo de españoles que arribaron a la región con la misión de invadir y colonizar estas tierras. En el año 1920 el padre Pantaleón García, recordado como Pa’i García, fue designado como cura párroco de la iglesia Virgen del Rosario de Luque, convirtiéndose en el principal impulsor de la edificación del templo actual.
Bajo el liderazgo del Pa’i García y con la colaboración de los feligreses luqueños que aportaron piedra, arena, agua y otros materiales de construcción, la anhelada obra pudo concretarse finalmente en el año 1939. El licenciado Ocampos resalta la importancia del esfuerzo comunitario y la predisposición del pueblo luqueño en la materialización de este emblemático proyecto arquitectónico y espiritual.