Otro objetivo ahora declarado prófugo es el concejal colorado de Yby Pytá, Juan Antonio Villalba Cardozo, de 55 años, cuya casa fue una de las intervenidas. Este sería “suegro” de Macho y fue el que aparentemente avisó al criminal condenado de que los policías de Investigaciones estaban recorriendo la zona.
Los otros buscados por el ataque son el hermano de Macho, Carlos Ysabelino Acosta Riveros, de 31 años, y Heriberto Roa Coronel, de 34 años, quienes habrían integrado el grupo de sicarios.
Asuntos Internos investiga presunta protección a Macho
Los cateos de hoy, que resultaron infructuosos, fueron dirigidos por el fiscal de Curuguaty, Néstor Narváez; el director de Hechos Punibles de la Policía, comisario general César Silguero; el nuevo director de Policía de Canindeyú, comisario general Sebastián Ramírez, y el nuevo jefe de Investigaciones de ese departamento, comisario principal Hugo Grance.
Estos dos últimos asumieron luego de las destituciones de Víctor Tandí y Reinaldo Delgado, respectivamente, quienes ahora son investigados por la Dirección de Asuntos Internos por una probable protección que daban a Macho.
Asuntos Internos intervino por orden del comandante de la Policía, comisario general Carlos Benítez, y uno de los primeros datos recabados supone que Macho pagó 100.000 dólares para que no trascendiera el ataque a los policías. Coincidentemente, el informe que fue enviado a Asunción estaba totalmente distorsionado.