De acuerdo a la denuncia, el ladrón trepó un árbol ubicado sobre la vereda y subió a la planta alta del edificio. Ya en el interior se bajó por la escalera y tomó las llaves, que estaban sobre una mesa en el quincho. Hizo arrancar el rodado y abrió el portón con el mando a distancia y salió alejándose del lugar a bordo del vehículo Kia Sportage color plata.
La propietaria dijo no haber escuchado ruido alguno y que recién a la mañana se percató de que el vehículo ya no estaba en el patio.
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Tras intensos rastrillajes realizados por la Policía Nacional y la Guardia Civil Municipal de Frontera (GCMFront) se logró ubicar el rodado abandonado en un baldío ubicado en el barrio Jardín Nova Ponta Porã.
Dos personas quedaron detenidas por las autoridades brasileras y serán indagadas sobre las circunstancias en que dicho rodado fue a parar en el sitio, según informó Marcelino Nunes, secretario de Seguridad Pública de Ponta Porã.