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La lluvia es muy tempranera, considerando que durante el invierno chaqueño las lluvias empiezan normalmente a fines de septiembre u octubre.
Para este sábado se espera que los chubascos continúen aun un poco más a lo largo del día.
Al comienzo del año hubo grandes lluvias en varias partes del Chaco, inclusive causando inundaciones, a tal punto que hasta ahora, en la mayoría de los casos, los aljibes caseros aún estaban con el vital líquido, mientras a algunas comunidades indígenas se provee agua, sobre todo por falta de un buen mantenimiento de sus sistemas de agua. En el campo los tajamares aún tienen agua, mientras las pasturas implantadas para el ganado vacuno ya estaban escaseando y varios ganaderos estaban dando a sus animales fardos de heno, preparados con anterioridad o comprados.
La actual lluvia no cambiara esta situación, pues es muy pequeña, pero sirve para limpiar el paisaje del polvo.