Luego del angustioso caso del robo de una bebé por parte de una ciudadana argentina Natalia Edith González (39 años), del Hospital General de Barrio Obrero, el jueves último, la mujer fue detenida a poco de cruzar al lado argentino a través de Nanawa y de su poder se recuperó a la recién nacida, que inmediatamente después fue entregada a su madre.
Ante los reclamos, tanto de los familiares de la bebé, como de otros pacientes, y ante los recurrentes casos de este tipo, ayer a la mañana los ministros de Salud Pública y Bienestar Social, María Teresa Barán, y del Interior, Enrique Riera Escudero, mantuvieron una reunión virtual para delinear estrategias conjuntas con el fin de mejorar la seguridad en hospitales de todo el país.
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En esa junta los ministros acordaron conformar equipos técnicos, integrados por personal del Ministerio de Salud y especialistas en planificación de la Policía Nacional. Además, dispusieron que los mismos deberán identificar cuáles son los “hospitales prioritarios y evaluar sus necesidades específicas en materia de seguridad”.
El objetivo, con esto, es delinear acciones conjuntas para mejorar la protección en los servicios públicos.
Despliegue policial en hospitales de la capital
De acuerdo con lo que se informó desde la Policía Nacional, a partir de las 12:00 de este sábado, varios equipos policiales ya fueron desplegados por centros hospitalarios para la tarea de cobertura de seguridad y prevención.
En este contexto los equipos policiales fueron distribuidos al: Hospital General de Barrio Obrero, donde ocurrió precisamente el último caso de robo de un bebé; Hospital Materno Infantil de Santísima Trinidad; Hospital Materno Infantil de San Pablo, donde también se había registrado el robo de una recién nacida y que, luego de un arduo operativo de búsqueda fue recuperada en manos de una pareja; y Hospital Materno Infantil de Loma Pytã.
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Cada uno de estos centros hospitalarios contará con presencia policial permanente, con especial custodia en las áreas de maternidad, con la finalidad de prevenir hechos punibles, así como la de ofrecer un entorno más seguro para los usuarios.
Estos equipos de la Policía Nacional realizarán las tareas bajo la supervisión del comisario general inspector Venancio Benítez Meza, actual director de Policía de Asunción.
También tendrá guardia privada tras robo de bebé
Por otra parte, también desde ayer sábado, personal de seguridad de una empresa privada se encuentra apostado prestando servicio en el Hospital General de Barrio Obrero, según lo que informó el director del hospital, Dr. Adán Godoy.
La contratación se dio luego del robo de una bebé, el pasado jueves.
La empresa resolvió enviar con anticipación 12 guardias de seguridad, adelantándose a la fecha a partir de la cual estaba obligada por el contrato a prestar el servicio. Se trata de la primera vez que el mencionado centro hospitalario cuenta con un servicio de este tipo en materia de seguridad.
El jueves último, el director médico del mencionado hospital, Dr. Rodrigo Mallada, había señalado ante los medios de prensa que la guardia privada de seguridad se había gestionado con anterioridad al robo de la bebé y que estarían haciendo efectiva esta en enero.
Compromiso de mejorar la seguridad
El ministro Riera propuso que los directores departamentales de la Policía se reúnan con los directores regionales de salud para seleccionar los hospitales “más importantes”.
Posteriormente, van a realizar visitas para analizar ciertos aspectos como los accesos, la iluminación en los predios y la eventual necesidad de cámaras de vigilancia en donde no hay.
La ministra Barán, por su parte, enfatizó la importancia de estas reuniones para mejorar la seguridad en los hospitales, especialmente durante los fines de semana.
Medida se estrenó con detención
Luego de ponerse en marcha ayer al mediodía la presencia policial en los hospitales, específicamente en cuatro de Asunción, la Policía ya identificó y arrestó en el Hospital Materno Infantil de Loma Pytã a una mujer que contaba con orden de captura.
El hecho se registró a las 14:30, donde uno de los uniformados destinados a la custodia del mencionado centro sanitario verificó los datos de Shirley Celeste Bernal, de 29 años, y constató en el sistema informático que contaba con una orden de captura pendiente por violación del deber legal de cuidado y educación.
La mujer, que estaba internada en el lugar, quedó igualmente ahí, pero ya con custodia policial.