Fe inquebrantable: peregrinos desafían el temporal rumbo a la Virgen de Caacupé

CORONEL OVIEDO. Ni un fuerte temporal fue suficiente para atajar la fe de los peregrinos que siguen camino a la Virgen de Caacupé. Una intensa lluvia y ráfagas de viento se registraron desde las 14:40 horas en el departamento de Caaguazú, y pese a la peligrosidad de la ruta, los fieles aseguran que es un alivio de la Virgen para sofocar el intenso calor y refrescar el camino de la fe.

Pese al fuerte temporal, peregrinos continúan su camino rumbo a Caacupé.
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Una cantidad importante de peregrinos sigue avanzando en estos momentos por la ciudad de Coronel Oviedo, situada a 80 kilómetros de la capital espiritual, Caacupé. Ciclistas, motociclistas y algunos caminantes continúan en masa, bajo la lluvia rumbo a la villa serrana.

Por el camino, algunos promeseros entablan amistades y unen fuerzas para continuar con sus trayectos y cumplir sus promesas a la Virgen de Caacupé.

Es el caso de los ciclistas Edgar Cárdenas, oriundo de la ciudad de Caaguazú, y Richard García, de Ciudad del Este. Ambos se encontraron en la ruta durante el temporal y, tras unas pocas palabras, se hicieron amigos, decidiendo pedalear juntos, uno detrás del otro, para llegar hasta la Virgen de Caacupé.

Los ciclistas Edgar Cárdenas (verde), oriundo de la ciudad de Caaguazú, y Richard García (Turquesa), de Ciudad del Este, rumbo a Caacupé.

El promesero Edgar Cárdenas afirmó que la lluvia trajo alivio y le da más fuerza para seguir con su objetivo y su fe en la Virgen de Caacupé. Señaló que tiene una promesa muy importante, ya que su madre sufrió un grave problema de salud y él pidió a la Virgen por su recuperación. Por esta razón, está decidido a cumplir su promesa y llegar como sea junto a la Virgen.

Por su parte, Richard García comentó que lleva cuatro años viajando desde Ciudad del Este para cumplir su promesa con la Virgen de Caacupé. Relató que su compromiso surgió cuando pidió la salvación de su abuela, quien padecía una enfermedad grave que le causaba mucho sufrimiento. Expresó que, aunque su abuela ya no está con vida, logró descansar del dolor que soportó en sus últimos días, y él sigue agradecido por ello.

Además, en la zona del cruce internacional de Coronel Oviedo, se observa a varios vehículos particulares, taxis y buses cargando pasajeros y dirigiéndose en caravana hacia Caacupé.

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