Mientras senadores y diputados aprueban un autoaumento salarial de G. 6.000.000 y varios beneficios, los hospitales del país sufren múltiples carencias. El Hospital Nacional de Itauguá es uno de los principales centros de referencia de Central y con frecuencia sufre múltiples carencias.
“La realidad sigue siendo la misma, el suministro discontinuo, porque esa es la estrategia actual, discontinuo de los insumos, por lo visto porque alguien se plaguea viene un poquitito, después pasa algo por el camino y se olvidan de todo lo demás”, lamentó el doctor Jesús Irrazábal.
Lea más: PGN 2025: Senado se burla de ciudadanía y da vía libre a aumentazos y nepobabies
Agregó que hoy no tienen, por ejemplo, un insumo tan básico como la jeringa. “Imagínense como va a ser este fin de semana, con todos esos pacientes dando vueltas, pidiendo camas, pidiendo lugar, nosotros, el Hospital Nacional que tiene que dar la respuesta inmediata, sin jeringas, cualquier paciente que venga con paro cardiaco o porque se accidentó... Estará sin jeringas”, lamentó.
Para ejemplificar la gravedad de la situación, contó que no tienen cómo atender rápidamente los casos de urgencia. “Imagínense lo que es que una mamá nos trae a su hijo convulsionando y nosotros le pedimos que compre una jeringa de la farmacia que está a 10 cuadras, ella tiene que ir corriendo esas 10 cuadras y venir corriendo de vuelta, mientras su hijo sigue convulsionado. Ese es el marco real; si no tenés jeringa, no podés administrar, no hay forma”, lamentó.
Agregó que eso van a sufrir este fin de semana, días en los que con frecuencia se da el incremento de pacientes que llegan de urgencia.
Lea más: Presupuesto 2025: No hay plata para mamógrafos, pero si para aumentazos de parlamentarios
El problema está en la ejecución
El doctor resaltó que ellos ven que el problema real está en la Ejecución del presupuesto. “Una cosa es lo que dice el presupuesto, los numeritos que brillan ahí, y otra cosa completamente diferente es lo que se ejecuta en el año y cómo se ejecuta, porque eso es lo que estamos sufriendo nosotros”, sostuvo.
“Tenemos una ejecución presupuestaria pobre, dirigida, para esto si para esto no, entonces en ese sentido el PGN, en lo que le compete al Ministerio de Salud Pública, es una letra muerta”, lamentó.
Agregó que los proyectos que se hablan en el Congreso y los incrementos presupuestarios no se reflejan en la realidad de los hospitales.
“Todos los años es lo mismo, promesas y promesas. Vemos no solo con muy malos ojos (el autoaumento) sino con mucha desconfianza”, consideró.
Aseguró en ese sentido que están seguros de que el presupuesto será “inflado” y al final va a responder a los intereses particulares y privados. “Pero cuando hablamos de salud y educación, para ponerle techo a las escuelas y atenderle a nuestra gente en el sufrimiento, eso sí que sea a cuotas, en gotitas”, lamentó.
Finalmente, señaló que la responsabilidad de la ejecución presupuestaria recae en el Ministerio de Economía, pero, por sobre todo, en “el jefe” que es el presidente Santiago Peña.