Éver Núñez, arquitecto encargado de la obra, explicó que la rotonda que se encontraba detrás de la basílica fue eliminada para extender el paseo de la plaza Teniente Fariña hasta donde estaba ubicada la Virgen hecha de botellas. Esta imagen fue sacada del lugar y se llevará a la zona del Kurusu Peregrino.
Núñez detalló que este proyecto está bajo la dirección de la Municipalidad de Caacupé y el artista plástico Ricardo Núñez, quienes van a poner una estatua de la Virgen en el lugar.
El arquitecto indicó que en el sitio se ocupará unos 3 metros de la vereda, agrandando así un poco más la ruta que podrán utilizar los peatones. “Y el resto quedará para el paso de los vehículos”, dijo.
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Una estatua de 12 metros
El artista plástico Ricardo Núñez, creador de la estatua de la Virgen de Caacupé, mencionó que para la seguridad de los peregrinos es que se está preparando este espacio especial, para el mejor desplazamiento de los visitantes que van a pasar a admirar la imagen.
“Conocemos la alegría de la gente y sabemos que cuando hay atracciones en la ciudad hay aglomeración de personas y no queremos que hayan percances por los vehículos que circulan por la vía, dijo.
“Queremos que se tenga un lugar seguro para los visitantes. La rotonda se sacó para que los feligreses tengan más espacio para acercarse a la escultura que se colocará en estos días”, explicó Núñez.
La escultura que se tendrá en la parte trasera de la basílica mide 12 metros. Esta obra fue financiada por la Municipalidad de Caacupé y costó G. 225 millones. Está hecha de hierro, cemento y fibra, con el mismo material que se utilizó para la escultura que fue puesta en Tupãsy Ykuá.
Núñez adelantó que el próximo 5 de diciembre la estatua, junto con el espacio, serán inaugurados con la presencia de varias autoridades.
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