El pasado 9 de noviembre, en la plaza Teniente Fariña de Caacupé, se aprehendió a un hombre que comercializaba una docena de animales silvestres, entre los que se encontraban pichones de tucán, monos y loros, los cuales estaban siendo ofrecidos en precarias condiciones. Ante esto, la Policía Nacional informó a todos los trabajadores de la Villa Serrana que está prohibida la venta de animales.
El subjefe de la Comisaría Primera de Caacupé, comisario Herminio Gamarra, explicó que, cuando se inicie el novenario de la Virgen de Caacupé el 28 de noviembre, trabajarán de forma coordinada con el equipo del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) para evitar el comercio ilegal de animales silvestres. Este trabajo en conjunto se extenderá hasta el 15 de diciembre.
Gamarra mencionó que el recorrido será largo, teniendo en cuenta que habrá más de 1.200 puestos ubicados en la ciudad, y todos deberán ser visitados.
Recordó que, en la última reunión que tuvieron el 15 de noviembre con las diferentes instituciones involucradas en el operativo, se destacó que uno de los principales temas será cumplir con esta revisión para evitar este tipo de situaciones. “Esto es algo que ocurre cada año en el novenario porque viene gente desde diversos puntos del país a preparar sus stands y vender de todo. Los indígenas son quienes más traen animales silvestres para negociar en Caacupé”, indicó Gamarra.
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¿Qué dice la ley?
La Ley Nº 96/92 ‘De Vida Silvestre’ permite la tenencia de animales silvestres, pero bajo un permiso otorgado por el Ministerio del Ambiente. Cabe recordar que se consideran silvestres a todas las especies que son nativas de una zona, en este caso, de Paraguay.
¿Qué requisitos se deben tener en cuenta para tener animales silvestres?
El permiso de tenencia de mascotas silvestres tiene una validez de un año, por lo que debe renovarse anualmente. Para obtenerlo, es necesario presentar varios documentos, como una nota de solicitud de registro, un certificado veterinario y el registro de varios formularios, entre otros requisitos.
El costo de dicho permiso es de tres jornales mínimos, según el salario vigente. Entre las declaraciones juradas que deben firmarse se incluye informar la manera en que se obtuvo el animal, ya que la caza y venta de vida silvestre están prohibidas. Sin embargo, muchas personas mienten y aseguran que los animales les fueron regalados o encontrados en cualquier lugar.
Quienes no posean el permiso correspondiente se exponen a multas que van desde 1 hasta 20.000 jornales mínimos, además de penas privativas de libertad, dependiendo de la gravedad del caso.”