La obra para el hospital de Choré, construida y abandonada, es el epicentro del conflicto. La disputa gira principalmente en torno a la construcción de un hospital en Choré, proyecto iniciado durante la administración de Giménez como gobernador. La obra quedó culminada, falta equipar y hacer funcionar, y no puede habilitarse por problemas legales relacionados con el terreno. Según Giménez, “el embargo del terreno es una jugada política” y se pone como obstáculo para habilitar.
En declaraciones a medios locales, el ministro acusó a D’Ecclesiis de actuar con “odio y caprichos personales, por ñañá, está trabando todo, pido que se inaugure el hospital, es una vergüenza que un local de salud esté cerrado por su capricho”, dijo.
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Freddy D’Ecclesiis responde con dureza
Por su parte, Freddy D’Ecclesiis justificó la paralización de la obra señalando irregularidades en su ejecución. Afirmó que Giménez construyó el hospital en un terreno familiar sin transferirlo al Ministerio de Salud o a la gobernación, lo que complica su uso. “Construyó a su estilo mbaretépe y dejó un problema legal que no se puede resolver”, señaló
Además, calificó al ministro de “irresponsable y mentiroso”, acusándolo de que tiene problemas psicológicos.
“Es psiquiátrico su problema, le recomiendo someterse a un tratamiento psicológico y psiquiátrico. Su gestión está marcada por irregularidades, desde su tiempo como gobernador hasta ahora como ministro”, declaró el gobernador.
El conflicto entre ambos líderes oficialistas perjudica la coordinación administrativa en el departamento, obstaculizando proyectos importantes y generando descontento en la ciudadanía. Los intentos de reconciliación promovidos por altas autoridades políticas y líderes comunitarios no han tenido éxito y los aparentes “abrazos de paz” se han demostrado falsos, como lo evidencian las recientes declaraciones públicas cargadas de ataques.
La situación no solo afecta el desarrollo de obras como el hospital, sino que también pone en evidencia problemas estructurales en la gestión política de San Pedro por las disputas personales.
Organizaciones locales y habitantes instan a ambos líderes a dejar de lado sus diferencias y trabajar en conjunto para priorizar las necesidades del departamento. El hospital de Choré, que representa un servicio crucial para la región, se ha convertido en un símbolo del impacto negativo que las rivalidades políticas pueden diezmar el desarrollo.
El enfrentamiento, lejos de resolverse, continúa escalando y deja a San Pedro en una situación de incertidumbre.