El pasado 4 de octubre, la Junta Municipal resolvió aprobar la intervención urgente del Jardín Botánico de Asunción, a fin de alumbrar y arreglar el vallado del predio, que es considerado el pulmón verde más importante la capital.
Lea más: Aprueban intervención urgente del Jardín Botánico y Zoológico de Asunción
Una intervención del espacio verde, que es sumamente utilizado por la ciudadanía para realizar actividades al aire libre, también había sido aprobada en abril del 2021, tras un caso de abuso sexual ocurrido en el predio del que fue víctima una mujer que se encontraba realizando su entrenamiento físico.
En aquel entonces, el exedil Rodrigo Buongermini solicitó la interpelación del intendente asunceno, Óscar “Nenecho” Rodríguez, y de la directora del Jardín Botánico, Maris Llorens. Asimismo, mientras que la edil Rosanna Rolón, pidió a la Intendencia Municipal la urgente intervención del Jardín Botánico y la elaboración de un Plan de Seguridad y de Limpieza.
Lea también: Concejales asuncenos aprobaron la intervención del Jardín Botánico
Pese a las promesas realizadas por la Municipalidad de Asunción, el Jardín Botánico muestra un vergonzoso estado de abandono y cada vez menos personas tienen el valor de acudir al lugar para pasar el día con su familia o utilizar el predio para realizar actividades físicas.
Jardín Botánico expuesto a la inseguridad
El calamitoso estado del Jardín Botánico de Asunción puede observarse con tan solo pasar por sus alrededores, es decir, sin tener que ingresar al predio, que tiene 230 hectáreas.
Las vallas de seguridad que deben servir de protección e impedir el ingreso de extraños por otros sectores que no sean las entradas principales, han sido completamente arrancadas de sus bases, quedando el lugar desprotegido totalmente. Esta situación se da principalmente sobre la calle Carlos Fiebrig, que conduce a Zeballos Cue.
La ciudadanía manifiesta su miedo de acudir al lugar, por la falta de seguridad principalmente. Además, es notaria la falta de cuidado en todos los sectores del espacio que está cada vez más lejos de ser recreativo.