El dirigente Ángel Cano dijo que la escasez de agua en el río produce inconvenientes en cuanto a cardúmenes; los peces se acumulan en la zona de confluencia de los ríos Paraná y Paraguay.
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La pronunciada bajante evita que los peces suban hasta la altura de Ayolas.
Esta situación, que se arrastra desde hace varios meses, evita que los trabajadores del sector pesquero comercial se puedan preparar para los 47 días de veda 2024-2025.
Se pondrá en marcha el 4 de noviembre próximo y, en aguas compartidas con la Argentina, se extenderá hasta el 20 de diciembre del año en curso, explicó.
“Principalmente, los trabajadores del sector pesquero comercial lograron juntar muy poca reserva económica para la veda, que ya tiene fecha definida, y solamente se aguarda la Resolución del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades)”, indicó.
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Crisis hídrica del río Paraná motiva asistencia
En otro momento, manifestó que Yacyretá estaría entregando kits de 50 kilos de productos alimenticios para cada pescador. La asistencia alimentaria se efectuará dentro de los primeros 15 días de la veda.
Para la segunda quincena se prevé el desembolso del subsidio económico de G. 1.000.000.
En la oficina de pesca del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), sede Ayolas, existen registrados 1.447 pescadores con licencia al día.
El documento les permitirá acceder a la asistencia de Yacyretá y al pago del subsidio por veda que se efectúa a través del Ministerio de Desarrollo Social (MDS).